El gobernador Gustavo Bordet recibió, junto al titular de la cartera de Producción, Carlos Schepens, a empresarios de la cadena avícola, quienes se mostraron preocupados por "la falta de competitividad del sector", explicó el ministro. "Siempre que hubo un reclamo hemos rápidamente trabajado sobre el tema", resaltó.
La reunión se produjo en la Casa de Entre Ríos, en Buenos Aires, y desde el sector avícola participaron el representante de Granja Tres Arroyos, Marcelo De Grazia, y de Noelma S.A., Héctor Eggs. "Lo que hay que buscar es la competitividad", remarcó el titular de Producción y aclaró que se trabajan "algunas variables", por lo que "es una elección política que tiene el gobierno nacional".
En ese sentido, Schepens resaltó que cuando se toman decisiones "hay sectores que se afectan y atrás de esos sectores siempre hay gente, sobre todo en una cadena de valor como la avícola que tiene tanta gente en el campo y en la industria".
A partir de acá, "el gobernador se comprometió a hacer las gestiones correspondientes para llevar lo que no podemos resolver a nivel provincial, a la Nación" y confirmó que la provincia va a tomar las medidas que estén a su alcance "sobre todo en la parte financiera" señaló Schepens.
EMPRESARIOS. Tras la reunión, De Grazia, apuntó que con el gobernador hablaron "de la situación actual de la avicultura", y que se encontraron "con muy buena recepción por parte del gobernador". Además contó que analizaron "algunos problemas con respecto a la exportación, la competitividad del tipo de cambio, etcétera".
Por su parte, el representante de la firma Noelma S.A., Héctor Eggs, precisó que en la planta de proceso de Noelma "trabajan 550 operarios y en Tres Arroyos, hay más de 2000. El problema es que es una cadena humana muy grande, no es la planta de proceso. La planta de proceso es un poco el fin de la cadena. Esto nace desde donde fabricamos una reproductora, o una abuela, un pollito, una incubación, alimentación. Hay una cadena humana en el medio tremenda.
Termina en la planta de proceso y en el fondo termina haciendo el pasamano comercial el cliente de distintos lugares del país o del mundo". Por último, Eggs explicó además que para dar una idea muy certera, "cada millón de pollos se ocupan mil personas, por lo tanto una compañía que tiene siete millones de cabezas quiere decir que tiene siete mil personas ocupadas, que dependen de esa situación directamente y algunos indirectamente".