La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, inauguró "La Isidora", que está destinada a regular los caudales fluviales y proteger de las inundaciones a la ciudad de Azul.
Fuentes gubernamentales sostuvieron que se trata de una de las obras hídricas más importantes que se desarrollaron en el interior bonaerense y que no sólo favorecerá a Azul, sino que mejorará el control de los afluentes y el ingreso de agua al partido de Las Flores, que está incluido dentro de la cuenca del Salado.
Según se informó la obra contó con una inversión de 214 millones de pesos y beneficiará a 65.000 vecinos, ya que se podrá controlar las crecidas generadas en la cuenca alta del arroyo Azul y atenuará su impacto sobre el casco urbano de la ciudad.
Vidal recorrió la obra junto al intendente local, Hernán Bertellys, el jefe comunal de Olavarría, Ezequiel Galli y a vecinos damnificados de la zona.