La medida obedece a los fenómenos meteorológicos ocurridos el año pasado sobre la producción frutícola, hortícola y vitivinícola rionegrina, "que por sus características y magnitud afectaron de manera considerable a los productores", indicó el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca rionegrino, Alberto Diomedi.
El decreto establece que "desde el 11 de abril y por el período de un año, los productores de los mencionados departamentos quedarán eximidos total o parcialmente, en función del nivel de afectación, del pago del impuesto inmobiliario en los inmuebles rurales y subrurales".
La normativa también libera a los damnificados del pago del impuesto automotor o de sellos, en los actos, contratos u operaciones, de los bienes "destinados a la actividad agropecuaria".
"Con la declaración provincial comenzaremos a tramitar ante el Ministerio de Agroindustria la homologación nacional de la emergencia para continuar asistiendo a nuestros productores", agregó Diomedi.
De ese modo el gobierno rionegrino "reconoce los daños provocados por el granizo, la lluvia y las heladas, que se sucedieron en distintos puntos de la Provincia entre los meses de agosto y noviembre de 2016".