El cuarto trimestre marcó un crecimiento de 0,5% en comparación con los tres meses anteriores, por lo que la economía ya acumuló su segundo trimestre seguido de leve expansión, aunque la cifra final de 2016 marcó que la caída de la actividad fue de 2,3%. El débil repunte del segundo semestre se sostiene, según analistas, en el aumento de las exportaciones en el sector agropecuario. El consumo privado y la inversión, por su parte, registraron durante el año pasado caídas de 1,4% y 5,5% respectivamente.
Entre los componentes de la demanda global, el 2016 finalizó con sólo dos datos en positivo: las exportaciones (3,7%) y el consumo público (0,3%). Desagregado por sectores, los únicos que mostraron avances en el valor agregado bruto fueron "electricidad, gas y agua", "restaurantes y hoteles", "transporte, almacenamiento y comunicaciones", "administración pública", "enseñanza", "servicios de salud". El resto de los sectores mostró retrocesos.
Los más pronunciados fueron la construcción (11,3%), industria manufacturera (5,7%), agricultura, ganadería y pesca (5,5%) y minería (5,3%).
Para el economista Federico Muñoz, "no es una recuperación como para alardear, es una salida muy débil de la recesión. Si vemos en el desglose el consumo privado continuó con una tendencia decreciente, la inversión también sigue en declinación. En los dos últimos trimestres se puede ver que la única variable expansiva son las exportaciones y el principal factor en ese rubro es el agro".
Para el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), "la rama agricultura, ganadería y pesca ha mostrado un crecimiento importante en cuanto a su representación en el Valor Agregado Bruto, pasando de explicar 5,76% del VAB en 2015 a 7,24% en 2016, es decir una variación positiva de 1,48 puntos porcentuales".
Para el magíster en sociología económica Daniel Schteingart "el agro hizo crecer a sectores conexos, por ejemplo maquinaria agrícola. La producción de tractores, cosechadoras, sembradoras de origen nacional subió pero mucho menos que los importados".
El retroceso de la inversión El economista Lorenzo Sigaut Gravina advirtió que "el ratio inversión producto retrocedió el año pasado.
A precios constantes dicho cociente pasó de 19,6% del PBI en 2015, a 19% en 2016". Para cumplir con la meta oficial de 3,5% de crecimiento, advierte Sigaut Gravina la economía tendrá que trepar en términos desestacionalizados casi 1,5% por trimestre por trimestre, casi 6% entre puntas, "un crecimiento que luce muy ambicioso".
Respecto al "derrame" de la economía en expansión, Muñoz consideró que "en el primer trimestre de este año creemos que la economía va a mostrar un crecimiento sensiblemente mayor al 0,5% del cuarto trimestre, y estará combinado con "un retroceso de la inflación y una recuperación del salario real".
Para Schteingart, en tanto, "la economía va a estar mejor este año que en 2016, algunos sectores van a ser muy dinámicos y otros más complicados, principalmente industriales, que con una combinación de apertura de importaciones, apreciación cambiaria y encima política monetaria contractiva va a ser difícil que puedan crecer".