Pobladores de 11 localidades del partido bonaerense de General Villegas, que están inundados, marcharán mañana hasta la plaza central de la cabecera para exigir al intendente del distrito que reclame la intervención del gobierno provincial para evitar el agravamiento de la situación ante el ingreso de agua de Córdoba y evitar pérdida de cosechas y daños a los cascos urbanos.
Así lo acordaron los pueblos del partido reunidos en las últimas horas en asamblea en la localidad de Piedritas, donde representantes de cada localidad detallaron los problemas que ha ocasionado el agua que afecta a ese partido desde octubre último por acumulación de lluvias y en las últimas semanas debido al ingreso de una gran masa de agua de la provincia de Córdoba.
Según precisó hoy el Coordinador de Defensa Civil de General Villegas, Juan Pablo Del Vecchio, "sigue entrando agua a General Villegas, ayer creció 3 centímetros y hoy ya llevamos 1 centímetro y medio".
"Los caminos siguen afectados y se está evaluando organizar la salida de cereal permitiendo el paso de camiones con un peso de carga determinado, muy inferior al que deberían pero con el objetivo de preservar los caminos", apuntó.
El integrante de la Sociedad Rural de General Villegas, Guillermo Chapado, explicó a Télam que "la situación es dramática y excede al intendente Eduardo Campana, por eso marcharemos mañana a la plaza de la cabecera para pedirle que exija la intervención de las autoridades provinciales, que venga la gobernadora María Eugenia Vidal y vea lo que estamos viviendo o mande a alguien con poder de decisión".
"En unos días empieza la cosecha y eso será imposible porque los caminos productivos están destruidos, no se podrá sacar la cosecha y si el agua no drena tampoco se podrá sembrar", precisó.
Chapado aseguró que "más de 500.000 hectáreas están bajo agua, ya han cerrado tambos y el panorama es desalentador".
"Se necesita que parte del agua drene para Trenque Lauquen y otra parte para el Salado pero aún no están concluidas las obras en la parte baja (de la cuenca del Salado) por lo que no hay dónde mandar el agua", detalló.
La Asamblea de vecinos autoconvocados resolvió también pedir que las máquinas retroexcavadoras "trabajen de sol a sol".
La Delegada de Emilio V. Bunge, uno de los pueblos afectados, Liliana Lovagnini, detalló que "sigue entrando agua y los caminos conducen agua, se han convertido en ríos".
"El mayor problema de Bunge es que es zona lechera y el problema es cómo sacar en tractores con carro la producción", reconoció la delegada, que precisó que "han sido años de no hacer obras en los caminos y eso se nota en una situación como la que vivimos, donde las lluvias han sido inusitadas".