La mayor parte de esta caída fue trasladada al precio de la hacienda, por lo que la diferencia entre el precio al que la industria frigorífica compra la materia prima y el de venta de sus productos se mantuvo incambiada en términos porcentuales en la comparación mensual, según un análisis de Tardáguila Agromercados.
INAC dijo que la caída se explica por "una disminución de los valores en dólares de la canal al mercado interno, de los cortes de exportación, del valor de las menudencias y sub-productos y del precio del cuero fresco, todo medido en dólares corrientes".
Pero a su vez, el valor medio de compra de los novillos por parte de la industria se contrajo US$ 24 alcanzándose una media de US$ 797 por cabeza, el mínimo desde junio pasado.
Valor agregado industrial
Por lo tanto, lo que el INAC denomina el Valor Agregado Industrial (VAI) -la diferencia entre ambos- sufrió un descenso de US$ 8 a US$ 286 y en términos porcentuales se mantuvo sin cambios en 26,4% del valor total del Novillo Tipo.
De acuerdo a lo manejado por el INAC, un VAI de más de 25% implica una situación relativamente confortable para la industria.
Con ese monto, los frigoríficos deben hacer frente a todos los demás costos de la empresa y quedarse con el margen. Desde el sector frigorífico, sin embargo, se advierte que los elevados costos de producir en Uruguay han elevado el peso de los demás costos que no son la materia prima.
A eso se refirió la semana pasada Eduardo Urgal, uno de los principales de frigorífico Pando, cuando concurrió a la reunión de precios de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG). Al mencionar al Novillo Tipo, dijo que los números de la industria están muy justos debido a que los costos que no son la materia prima (salarios, tarifas públicas, etcétera) han subido de forma consistente en los últimos años, en especial expresados en dólares
