La empresa que nació en Cañada Rosquín festejó los 40 años de vida. Instituciones vinculadas al sector, funcionarios provinciales, empresarios e instituciones participaron de los festejos: "Nuestro compromiso es con la calidad" destacó Hugo Bearzotti,
"Nuestro compromiso es con la calidad y con el cumplimiento de lo que hemos prometido al cliente" destacó Hugo Bearzotti, presidente de Industria Lacteas El Rosquinense SA, en el almuerzo que conmemoró los 40 años de la empresa.
El Rosquinense SA es una pyme láctea con historia y que forma parte de la vida cotidiana de generaciones de consumidores. A la elaboración del emblemático Dulce de Leche El Rosquinense en los hogares argentinos, el sector industrial utiliza esta materia prima para sus productos: alfajores, tortas, helados, masas, facturas, golosinas, etc.
El predio -de 8000 m2 se ubica en la localidad de Cañada Rosquín, Provincia de Santa Fe.
Hoy cumple años contando con 12 productos con diferentes características y perfiles.
De los festejos, que se realizaron en un salón de la localidad que vio nacer a la fábrica, participaron, además de los miembros del directorio de la empresa; Carlos Villano, presidente de Apymel; Jorge Cassini, de Apymil; Pedro Morini, secretario de Lechería de la Provincia de Santa Fe; Emiliano Pietropaolo, secretario de Industrias de dicha provincia, representantes de instituciones locales, empresas y amigos de la entidad.
Bearzotti subrayó también el rol de los proveedores "son de larga data, somos fieles porque estamos convencidos de que lo que nos entregan nos sirven para producir". Luego de agradecer a las diferentes instituciones de la localidad por el trabajo mancomunado, al sindicato de los trabajadores Atilra, el empresario subrayó "hemos tenido productores que nos han entregado la leche durante 35 años. Hemos cumplido siempre con nuestras obligaciones, aún en las épocas más difíciles".
A su turno, Morini subrayó "Santa Fe es tierra de Pymes Lácteas: más de 100 empresas distribuidas en toda la provincia. Esto tiene que ver con el arraigo. Por eso, defendemos esta noble actividad que genera gran parte de la mano de obra en los pueblos de nuestro interior, es un compromiso que asumimos". El funcionario provincial avizora para el 2017 "una posibilidad importante de crecimiento para el sector de la lechería. Hoy en la provincia se produce 30% menos de los valores históricos: esto equivale a 1000 millones de litros por año. Multipliquen el valor de la leche y verán cuánto dinero hemos perdido. La lechería -continuó- no es en Santa Fe un mero problema económico. Cuánta mano de obra, cuánto arraigo, cuántos pueblos del interior viven en base a la lechería. "
Pablo Villano, de Apymel aprovechó la ocasión para saludar a la empresa y destacó "el Rosquinense siempre apeló al buen criterio, al raciocinio y al equilibrio. Siempre nos dieron una mano. Cuando aún no teníamos un departamento jurídico en la asociación, (Hugo) Bearzotti colaboró desinteresadamente. Nos une una profunda amistad"
La Historia
El Rosquinense comenzó como una pequeña fábrica de dulce de leche que se distribuía esencialmente en Cañada Rosquín y en las localidades aledañas. Por su calidad, fue ganando nuevos mercados pero, aunque la marca comenzaba a posicionarse, su crecimiento no era el esperado.
El 29 de junio de 1978, un nuevo grupo empresario adquiere la planta industrial de Cañada Rosquín. A pesar de la situación económica desfavorable del país, la compañía fue creciendo.
En 1990 la empresa adquirió una nueva planta para la fabricación de turrones.
