Comenzó la campaña 2016/17 y ya se asoman las primeras estimaciones a nivel nacional, en un año que llegó con fuertes cambios para el sector agropecuario.
La rebaja de las retenciones, la eliminación de los cupos para la exportación y la devaluación del peso potenciaron la competitividad en la cadena, y eso ya se refleja en la intención de siembra del productor, así como también en las inversiones en tecnología.
Los números hablan: de acuerdo a un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, este año la oferta total de granos en el país sería de 113,9 millones de toneladas, lo que representa un incremento del orden del 4,6% con respecto a 2015. En hectáreas, el cálculo es de algo más de treinta y seis millones, al sumar la cobertura de los distintos ciclos.
Menos soja El estudio destacó que la soja perdería el 3% en la intención de siembra, a raíz de la incertidumbre en relación al nuevo recorte del 5% en las retenciones, que el Gobierno Nacional aún no garantizó.
"Sobresale, además, que por primera vez en muchos años un mayor porcentaje de los productores ha inclinado su balanza en favor de cultivos alternativos a la soja, no sólo porque dejaron de arrojar márgenes brutos negativos sino también por la necesidad de rotación de cultivos para incorporar nutrientes a los suelos", explicó.
De esta manera, las subas llegarían por el lado del girasol, con el 25%, y del maíz, con un avance del 22%. El trigo, por su parte, ganaría el 18% interanual. En tanto, el sorgo y la cebada perderían 9% y 15%, respectivamente, mientras que la cobertura del resto de los granos (alpiste, arroz, avena, centeno, entre otros) podría caer alrededor del 2%.
"Para estimar qué porción de la misma sería efectivamente cosechada, nos basamos en un promedio simple de las pérdidas de hectárea para cada cultivo durante los últimos cinco años, y aplicamos el mismo cociente a la nueva campaña", detalló la entidad rosarina.
Rendimientos Si bien para esta temporada se espera la llegada de La Niña, que traería altas temperaturas y escasas precipitaciones, la BCR visualiza un buen panorama. "Tenemos en lo inmediato una campaña que parte de niveles de humedad en los suelos promedio, al tiempo que se generaliza cada vez más la opinión que el fenómeno ENSO global tendería a un escenario neutral durante nuestra primavera/verano.
Sumado a ello, todo indica que en este nuevo ciclo comercial la incorporación de tecnología a los planteos agrícolas volvería a acercarse a sus niveles óptimos, lo que nos permite trabajar para todos los cultivos con un supuesto de rinde tendencial, por encima en lo general de lo que arrojaría el promedio simple", sostuvo.
Así, para la soja estimó veintiocho quintales por hectárea, setenta y cuatro para el maíz, treinta para el trigo y diecinueve para el girasol, con un total entre todos los productos de 35,6 quintales por hectárea, un número interesante sobre todo para la exportación, ya que el último año se perdieron negocios por baja calidad en los granos.
Precios En el mercado internacional, la caída de la soja preocupa cada vez más. Después de valores récord entre mayo y junio, hoy la oleaginosa acumula retrocesos significativos que parecen no tener piso. Sin embargo, la Bolsa de Rosario asegura que existe una única dirección posible: hacia arriba. Por eso, indicó que "el parámetro de ventas de los productores tanto en EE.UU. como Argentina deberá ser seguido con atención, por el impacto que podría tener en el mercado", ya que los primeros, por la estructura de precios a futuro, privilegiarán las ventas de soja y la retención de maíz, mientras que en el ámbito local se ajustó la comercialización de la oleaginosa.