Sin los límites y los subsidios del bloque europeo, los británicos tienden a importar más carnes de Brasil. Por otro lado, las negociaciones en torno al acuerdo comercial entre el Mercosur y la UE, que vienen demoradas, no se alterarán de forma repentina, a pesar de que exigen al sector cárnico mucha atención.
“Creo que el impacto será favorable”, dijo Fernando Galletti de Queiroz, presidente de Minerva Foods, segunda mayor exportadora de carne bovina de Brasil. El ejecutivo apuesta a que el Reino Unido demande más productos desde fuera de Europa, lo que puede beneficiar la carne bovina de Brasil. “Ellos son importadores de alimento y, estando fuera del mercado común europeo, importará más de otras regiones”, dijo.
Otra tendencia positiva es que Gran Bretaña no será más proteccionista que la UE, defendió Galletti de Queiroz. “En la peor de las hipótesis, el Reino Unido será igual. En la mejor, puede haber alguna flexibilización”, aseguró. “El proteccionismo de Bruselas es fruto, principalmente, de países como Francia e Irlanda”, agregó.
El presidente de la Asociación Brasileña de Industrias Exportadoras de Carnes (Abiec), Antonio Camardelli, coincidió con la evaluación del empresario. “No va a ser peor”.
El Reino Unido es el segundo mayor importador de carne bovina industrializada de Brasil. En total, es el undécimo mayor cliente de los frigoríficos del país. Compra poco más de 2% de la carne bovina exportada. Considerando solo la carne procesada, el país representa 25,7%.
Las carnes de pollo pueden tener igual suerte y ampliar las exportaciones, dijo el presidente de la Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA), Francisco Turra. Hoy existe un “pacto de preferencia” para la compra de pollo producido en la UE. Fuera del bloque, el Reino Unido comprará más pollo de Brasil, especialmente porque cuesta menos. Gran Bretaña adquiere 2% de los pollos que vende Brasil al exterior.
Turra consideró que la industria brasileña de pollo deberá seguir atentamente el Brexit, especialmente por la negociación del acuerdo entre el bloque europeo y el Mercosur. Puede haber cuotas de exportación en ese acuerdo, advierte el productor. Las discusiones preveían una cuota de exportacion de Brasil a la UE de 500.000 toneladas de carne de pollo por año, un agregado de 370.000 toneladas sobre la cuota actual con arancel cero. La salida del Reino Unido de la UE podría significar una reducción de esa cuota. “Es una pelea. El tema está abierto”, adviritó.
A corto plazo, el cambio puede ser la principal fuente de inestabilidad para los exportadores brasileños. Carlos Aguiar, superintedente de agronegocios del Santander Brasil, señaló que la depreciación de la lira y del euro presionan las ganancias de los exportadores. Para recomponerlos, se necesitará subir los precios.
Para el profesor del Instituto de Economía de la Universidad de Campinas (Unicamp) Marco Antonio Buainain, los impactos de la salida del Reino Unido de la UE en el mercado de commodities agrícolas en el mundo se restringirían a los ajuestes cambiarios. “Inglaterra no es un gran exportador o importador de commodities agrícolas, por lo que creo que los precios comercializados en las bolsas del país solamente se ajustarán al cambio”, afirmó.
A largo plazo, la decisión por el Brexit no provocaría grandes impactos en el merado de materias primas, coincidió el profesor de economía de la Universidad de San Pablo, Decio Zylbersztajn. “Vamos a continuar vendiendo para ellos, no tengo dudas. La demanda por alimentos no caerá”.