211 mm caídos en Carlos Pellegrini (Santa Fe), 245 mm en Arroyo Dulce (Buenos Aires) y acumulados generales que superaron los 150 mm en la zona núcleo dejan a los cultivos en una delicada y vulnerable situación. El temporal ocurrido entre el sábado 5 y el lunes 7 de abril afectaron severamente el centro de Santa Fe, oeste de Córdoba y a la provincia de Entre Ríos. En la región núcleo, las zonas bajas o de pobre escurrimiento están inundadas y los caminos a los lotes son intransitables. En general, no se lamentan pérdidas totales de lotes, pero hay sectores anegados dentro de los cuadros que no podrán recuperarse.
Previo al fenómeno de lluvias, la cosecha de soja de primera logró avanzar hasta el 37% de la superficie cultivada. Después, las labores quedaron en suspenso. Los cuadros de soja que no pudieron recolectarse son los más susceptibles a desgranes, brotado y disminución de la calidad del grano. Hasta ahora, los rindes de esta primera tanda cosechada se ubican en un 15% por debajo de la campaña pasada, en un rango que va de 33 a 38 qq/ha. Por el contrario, en la campaña pasada, el clima favoreció los cuadros sembrados tempranos con grupos cortos, obteniéndose para ese segmento muy buenos rindes.
La soja de segunda entra en la etapa final del ciclo, sin cambios en las condiciones fisiológicas respecto de la semana pasada. Persisten en este caso las altas las expectativas de rendimientos.
Con buen tiempo, la cosecha se reanudaría este fin de semana con la mayor celeridad posible. Se pronostican baja de temperaturas en los próximos días, lo que estabilizará las condiciones atmosféricas.
Relegado en favor de la soja, el maíz mostró un avance de cosecha –hasta cuando se pudo- muy desparejo; desde un 20% en la zonal de influencia de Marcos Juárez (Córdoba) hasta el 90% del área en Totoras (Santa Fe). Se amplía el rango de rindes obtenidos, con una caída del piso, quedando en 50 a 100 qq/ha. La fuertes ráfagas de viento del lunes (7/4) provocaron quebrado y descalce de plantas en algunas zonas. En Rojas hubo fuertes daños por granizo.
El maíz de diciembre se encuentra en grano pastoso. A pesar de que está lidiando con isoca de la espiga y carbón, los especialistas no creen que ocasione inconvenientes en la productividad. Se auguran rindes un promedio de 85 qq/ha con un desvío de 20 quintales.
SUBZONAS Y RED DE ESTACIONES METEOROLÓGICAS GEA
SUBZONA GEA I
“Nuevamente la lluvia complica la situación, en un escenario que se repite y se repite” expresan con desánimo los ingenieros de Carlos Pellegrini. Este fin de semana, en dos días llovieron 211 mm en el distrito. En la zona comentan que desde la primera inundación del año 2007 se acentuaron las condiciones ambientales extremas. “En cortos periodos de tiempo se pasa de sequías intensas a lluvias excesivas, y la infraestructura necesaria para encausar el agua no se hace. Los sistemas productivos deberán adecuarse y los productores que no puedan adaptarse lamentablemente tenderán a desaparecer” advierten los técnicos. En cuanto a la cosecha de soja, se ha podido levantar el grueso de la siembra de primera, no así el maíz, que se sembró en forma tardía y aún no ha terminado el ciclo. Con el 30 % de la superficie maicera recolectada, los rindes oscilan entre los 90 a 115 qq/ha. En soja se recolectó el 90 % y los rindes van de 38 a 55 qq/ha.
Las lluvias fueron de 150 mm en El Trébol, hay mucha agua pero para el viernes 11/4 seguro se reanudarán las labores en lotes altos. Se recolectó un 40% de soja de primera obteniendo rindes de 40 qq/ha con lotes de punta que alcanzan los 55 quintales. La calidad del grano es buena. No se detectaron pérdidas de superficie hasta el momento. La soja de segunda está en madurez fisiológica y en óptimo estado. Alcanzaría rindes entre 28 y 38 qq/ha con promedios de 33 quintales. El progreso de cosecha en maíz de primera es de 60%. Los resultados varían entre 60 y 100 qq/ha, ubicándose un 20% por debajo de lo esperado para esta zafra. El cereal de segunda atraviesa el llenado de grano y específicamente alcanza el estado de grano pastoso. Los cuadros que están en muy buen estado prometen rindes medios de 80 qq/ha.
En Los Cardos, el acumulado desde el sábado 5/4 a hoy 8/4 varía entre 80 y 150 mm y en algunas zonas supera los 200 mm. Cortes de rutas, caminos intransitables, lluvias torrenciales y mucho anegamiento es el escenario actual de la zona. “Es preocupante la situación, los lotes con escaso drenaje se perdieron e indudablemente se afectará la calidad tanto como el rendimiento en soja” anuncian con tristeza. Agregan que incluso en maíces de segunda, las enfermedades pueden transformarse en un problema aunque por el momento se encuentran en muy buen estado. En el caso de los maíces de primera, el quebrado de tallo es la consecuencia de las inclemencias climáticas. La cosecha tiene un progreso del 40 % y los rindes se desplazan entre los 50 y 90 qq/ha. En tanto la oleaginosa de primera, alcanza un 60% de recolección y obtiene rindes de 28 a 40 qq/ha. Se deduce que el peso de mil granos es menor que el valor de referencia. La soja de segunda se encuentra en llenado y madurez fisiológica. Los primeros lotes se estarían cosechando a partir de la próxima semana. En general están en buenas condiciones a pesar de la moderada presencia de EFC.
En Totoras las lluvias fueron de 150 mm. “Si no marcan más lluvias los pronósticos, no habría problemas serios” comentan los ingenieros. El 40% de la soja de primera fue recolectada y marca un promedio de 35 qq/ha dentro de un amplio rango de variación que va desde 18 a 53 qq/ha. Este resultado se ubica un 15% por debajo del esperado y del logrado el año pasado. En lo que respecta a la calidad del grano, “puede haber desarrollo de patógenos de semilla que incidan en el poder germinativo para la próxima campaña, por ahora no habrá perdidas por calidad comercial” explican los especialistas. En coincidencia con las localidades de esta subzona, no hay pérdidas de lotes pero sí de una proporción de la superficie. La oleaginosa de segunda se encuentra en muy buen estado transitando el estadio R7-R8. La cosecha del cereal de primera se encuentra relegada por ponderar la recolección de la oleaginosa. De todas maneras, sólo resta cosechar un 10% del área implantada. No hay variación de rindes con respecto a la semana anterior: entre 60 y 100 qq/ha, con promedios de 80 qq/ha. Los resultados coinciden con los previstos y están un 10% por debajo comparados con la campaña 12-13. El 80% del maíz tardío y de segunda se encuentra en llenado y el resto llegó a madurez fisiológica. La condición es muy buena a excelente en el 80% del área destinada a esta siembra. Se auguran rindes de 90 qq/ha en promedio, con extremos de 70 a 110 qq/ha. En materia de pla-gas, se destaca a la isoca de la espiga y en cuanto a enfermedades, Ustilago maydis (carbón de la espiga) es el más señalado.
En la zona de Bustinza los montos de lluvias acumulados desde el sábado 5/4 a la fecha 8/4 marcan 160 mm. “Está muy complicada la circulación por los caminos y algunas zonas son directamente inaccesibles” comentan los ingenieros. Casi el 50% del cultivo de soja fue recolectado. Los rindes que se mencionan van desde 32 a 45 qq/ha. “La soja de primera que queda por recolectar sería la más afectada en lo que respecta a calidad y puede haber desgranes” detallan. Por el momento, lamentaríamos pérdidas sólo en zonas bajas. La soja de segunda está en madurez fisiológica e intenta perder humedad. Los rindes que se esperan rondan los 30 qq/ha, entre 25 y 35 quintales. El maíz de primera tiene un gran avance de cosecha llegando al 80% del área. Los rindes que se obtienen van de 65 a 100 qq/ha. Algunos lotes que no se recolectaron tuvieron quebrado de tallo por las fuertes ráfagas. El cereal tardío y de segunda está en buenas condiciones terminando su ciclo.
SUBZONA GEA II
En Bigand, las lluvias sumaron 85 mm a la recarga del perfil del suelo. “Considerando los datos de otras zonas, no fue tan grave, aunque los excesos provocaron el crecimiento de las lagunas y el desarrollo de anegamietos parciales. Esto se suma al pésimo estado de los caminos rurales” detallan con abatimiento los técnicos. Con la mitad de la superficie de soja recolectada, la media lograda es de 33-34 qq/ha dentro de un rango de variación de 25 a 41 qq/ha. Este resultado se considera que es un 20% menor al esperado y a su vez se ubica un 20% por debajo del obtenido en la campaña pasada. Por el momento, no se detecta deterioro en la calidad del grano, de todas maneras gran parte de la recolección se realizó con humedad superior a la de recibo. El peso de mil granos es de 122 a 135 g. “No creemos que habrá pérdidas de lotes pero si de áreas bajas dentro del cuadro” destacan. De los pocos lotes cosechados de cereal de primera, los resultados se encuentran entre 70 y 115 qq/ha y se ubican un 15% por debajo de las expectativas. El peso de mil gra-nos ronda los 280 y 330 g. La oleaginosa de segunda se encuentra en estado de madurez y procuran rindes de 28 qq/ha entre amplios extremos que van desde 22 a 35 qq/ha. El 50% del cultivo implantado se califica como muy bueno y un 30% está en excelentes condiciones. El maíz sembrado en diciembre no se queda atrás en sus sobrasalientes calificaciones. Posee una expectativa de 90 qq/ha en promedio y podría desplazarse entre 70 y 115 qq/ha. Sin inconvenientes por excesos de humedad, el cultivo transita su etapa de lle-nado de granos.
Los acumulados hasta la fecha (8/4) alcanzaron los 98 mm en las inmediaciones de Bombal. “Es preocupan-te en tanto siga lloviendo” comentan los técnicos. Por fortuna, las partes bajas de la zona fueron recolectadas antes del evento climático. La cosecha de soja de primera comprende el 50% del área implantada. Los resultados son de 37 a 40 qq/ha y la calidad de grano no presenta anormalidades hasta el momento. No se repor-tan pérdidas de lotes. “La caída de las hojas del cultivo permite que el sol penetre para evaporar el agua. No obstante, el suelo se encuentra saturado de humedad y se demorará el regreso de las máquinas”. La oleaginosa de segunda siembra sigue en buen estado y posee las hojas semiverdes. Se encuentra en la etapa de secado. Los rendimientos esperados son de 32 qq/ha, techos de 35 y pisos de 30 quintales. Culminada la cosecha del cereal, el rinde es calificado como pobre. Se obtuvo un resultado de 60 a 70 qq/ha ubicándose un 30% por debajo de los logrados en una campaña normal. En tanto el cereal tardío persiste en buenas condiciones y apunta a 90 qq/ha en promedio, con un desvío de 20 quintales.
SUBZONA GEA III
“En Arroyo Dulce recibimos desde el sábado 5/4 al lunes 7/4 nada menos que 245 mm” comentan con desazón los ingenieros. El viernes antes del temporal los suelos seguían saturados así que los equipos de trilla (cosechadora y tractor) transitaban los lotes con la doble tracción conectada para evitar huellas profundas. “Por experiencias muy similares vividas en otras campañas, los lotes de soja que estaban aptos para trillar perderían de 6 a 8 quintales (4 como mínimo), según genética y grupo de madurez” se lamentan. Los últimos cuadros cosechados antes de la lluvia variaron entre 32 y 38 quintales para soja y entre 65 y 70 quinta-les para maíz, ambos de primera siembra. Los avances de trilla respectivos son de 18 y 60 %.
Entre el viernes 4/4 y el lunes 7/4 las lluvias rondaron los 180 y 200 mm en el partido de Rojas. Fue más in-tenso el sábado y ayer (7/4) fueron los últimos resquicios (40 mm) de un fin de semana muy llovedor. La cosecha de soja de primera estaba “a full” aunque había menguado un poco los días de alta humedad previos a las lluvias del fin de semana. “El grano ya estaba saliendo muy húmedo por eso tuvimos que detener las labores” aclaran los técnicos. Frente a un avance de cosecha de 45%, los rindes son 10 a 15 quintales inferiores a los de la campaña pasada. “Lotes que el año pasado dieron 50 qq/ha, este año están en 40” especifican. En general, el promedio obtenido está en 38 qq/ha. Aún no comienza la trilla para la oleaginosa de segunda. Había pocos lotes que estaban en condiciones de recibir las máquinas cuando comenzó este último episodio pluvial. Hay encharcamientos y la situación empeora hacia el sur del partido donde el relieve es más plano. De todos modos, estiman rindes medios para este cultivo de 25 a 30 qq/ha. De maíz de primera se lleva recolectado un 20% de la superficie. Los rindes son parejos y se posicionan en torno a los 80-100 qq/ha. El cereal tardío está en grano pastoso y con muy buen estado. Hubo una pequeña proporción de la superficie que fue afectada por granizo. Además, todas las espigas tienen isocas del género Heliothis pero “creemos que esto no afectará el rinde final porque la mayoría son híbridos resistentes que impiden que la oruga avance más allá de la punta de la espiga, sitio de la mazorca que aporta muy poco a la definición del rendimiento” esclarecen los especialistas. Así, se lograrían rindes entre 80 y 100 qq/ha, los cuales son bastante estables para este tipo de manejo del cereal.
En San Antonio de Areco llovieron 145 mm hasta hoy (8/4). “Hay desborde de ríos y arroyos que provocan el anegamiento de amplias zonas y el corte del tránsito dentro de una generalidad de caminos que se encuentran en mal estado”. Este contexto preocupa a los ingenieros y agregan que “el panorama es muy poco alentador para una cosecha que estaba entrando en ritmo”. Para que se pueda acceder nuevamente a los lo-tes, antes, deberán presentarse varios días de sol y baja humedad relativa. Esto siempre y cuando, los caminos permitan sacar la mercadería en tiempo y forma. “Es escasa la inversión que realiza el municipio para la mejora de caminos y seguro quedarán retazos de lotes que se perderán” se resignan los técnicos. Frente a un avance de cosecha de 25% para soja de primera, los rindes obtenidos son muy dispares con extremos entre 22 y 35 qq/ha. La calidad es buena pero se observan granos de tamaño pequeño. Al igual que en otras áreas, a medida que se avanza sobre cuadros de ciclos más largos (IV y V) sembrados en noviembre, van aumentando los rindes. Hasta ahora, se ubican un 18% por debajo de lo esperado para esta campaña y de lo obtenido el año pasado. En plena madurez fisiológica, la oleaginosa de segunda continúa en óptimo estado y prometen productividades medias de 28 qq/ha. Con un 70% de superficie trillada de maíz de primera, los rindes magros oscilan entre 35 y 75 qq/ha. Estos valores representan una reducción cercana al 30% respecto a la productividad alcanzada en el 2013. Sin problemas sanitarios, el cereal de segunda transita el llenado de granos y el ingreso a madurez fisiológica. Se observan en muy buen estado y auguran rindes más que aceptables de 75 qq/ha.
SUBZONA GEA IV
Las lluvias en el partido de Junín acumularon montos entre 110 y 220 mm provocando anegamientos temporarios. Por ende, la cosecha de soja se reanudaría como mínimo dentro de una semana. Antes de este episodio climático, la recolección de soja de primera había alcanzado el 30% de la superficie sembrada con este cultivo. “Los rindes obtenidos son excelentes, superando en casi todos los casos los 43 qq/ha” especifican los técnicos. Los mínimos y máximos alcanzados se sitúan en 38 y 55 quintales. Estos valores representan un alza interesante en relación a la campaña pasada y a lo esperado para este año. Estiman que el exceso hídrico generará pérdidas de superficie por cosecharse y afectará la calidad del grano. Se levantó el 70% de los cuadros de maíz de primera, con un resultado promedio de 85 qq/ha en un rango de variación de 65 a 120. Estos valores se enmarcan dentro de los esperados para esta campaña. Los cultivos de segunda siguen dando que hablar: “están insuperables, dando lugar a rendimientos muy destacados”. Por su parte la oleaginosa de segunda está entre R6 y R7 (pleno llenado y madurez fisiológica) y lograría techos de 40 qq/ha. El maíz tardío presenta niveles moderados de isoca de la espiga y de enfermedades como carbón. El 40% de los lotes alcanzó la madurez fisiológica y esta misma proporción presenta muy buen estado. El pro-medio rondaría los 65 qq/ha.
En las inmediaciones de Lincoln las lluvias fueron muy abundantes: de 90 a 240 mm. “Todavía es difícil evaluar el impacto, no creemos que sea grave” comentan los técnicos. Por fortuna, no hay lotes bajo agua sino zonas que podrían abarcar el 5% del total del área. Sólo el 5% de la soja de primera fue cosechado. Los rindes logrados están entre 35 y 38 qq/ha. “Nuestra experiencia indica que la calidad del grano no se afecta en cuatro días de lluvia” analizan. Si las condiciones continúan estables como hoy martes 8/4, el viernes se reanudarían las labores de recolección. Con un 20% del cereal de primera cosechado, los resultados comienzan a reflejar las expectativas: 50 a 70 qq/ha. Los maíces tardíos y de segunda están muy buenos. En tanto la oleaginosa de segunda siembra apunta a 22 y 26 qq/ha.
SUBZONA GEA V
Los 60-90 mm caídos en los alrededores de Marcos Juárez complican la situación. Fundamentalmente, el agua origina problemas importantes en zonas con napas altas y dificulta el tránsito por los caminos rurales. En consecuencia, la cosecha de muchos lotes se retrasa. “Tenemos un alto porcentaje de soja de primera cosechada (80%) y estábamos en plena cosecha de soja de segunda” precisan los técnicos. Los rindes me-dios obtenidos se ubican en 36 y 33 qq/ha, respectivamente. El peso de mil granos de soja de primera ronda los 137 g, valor que podría considerarse bajo para este tipo de siembra. Las plantas están severamente afectadas por Septoria y Cercospora. El progreso de la recolección de maíz de primera alcanza el 20% de la superficie destinada al cereal. Los rindes son muy dispares: 55 de mínimo y 145 qq/ha de máximo. El promedio para la zona se posiciona en los 100 quintales. El maíz de segunda transita el fin de llenado de granos y se aproxima a la madurez fisiológica. Con un alto nivel poblacional de isoca de la espiga, esperan rindes medios de 80 qq/ha en un intervalo con extremos de 50 y 110 quintales.
El sábado (5/4) llovieron 100 mm y ayer (7/4) cayeron otros 35 mm en los campos de Laborde. Estos acumulados se producen en un momento en que los perfiles de suelo se encontraban saturados. Por ello y sumado a que los caminos se tornan intransitables para derivar la mercadería, la cosecha se detuvo. Habiéndose trillado el 80% de la superficie destinada a soja de primera, los rindes medios obtenidos se posicionan en 40 qq/ha. “Se está cosechando seco pues se está embolsando todo” aclaran los técnicos. También empezó a “levantarse” la soja de segunda con productividades medias que se aproximan a las de la siembra temprana (38 qq/ha). El maíz de primera se sembró tarde en relación a lo que es normal para la zona. Los cuadros que se implantaron del 10 al 20 de octubre presentan una incipiente recolección de aproximadamente un 10%. Los resultados medios obtenidos se ubican en 100 qq/ha. Los maíces sembrados en diciembre se observan muy buenos a excelentes. La mayor proporción transita el estadio R5 (grano dentado). Para una cosecha que se estima que comience a fin de mayo, también esperan obtener 100 qq/ha de rendimiento me-dio. A pesar que estos híbridos sobrellevaron ataques de cogollero e isoca de la espiga y además daños por enfermedades como carbón y tizón en el final de su ciclo, las expectativas se mantienen elevadas.
Indicadores climáticos
Sol y bajas temperaturas
La semana comprendida entre el jueves 10 y el miércoles 16 de abril estará caracterizada por la estabilidad de las condiciones y el ingreso de aire frío a toda la región. En el comienzo del período, todavía quedará un resto de inestabilidad que dará como resultado un pequeño resto de precipitaciones débiles y aisladas, pero a medida que transcurra la misma jornada de jueves las condiciones se irán estabilizando. A partir del fin de semana, ya con las condiciones estables y el centro de alta presión instalado lo más significativo será el fuerte descenso térmico que se desarrollará sobre la región central del país, particularmente sobre la provincia de Buenos Aires y Córdoba, donde se prevé que las marcas térmicas caigan a valores cerca-nos a valores entre 2 y 4ºC, que pueden generar algunas heladas agronómicas especial-mente el domingo y lunes, que serán los días con temperaturas más bajas del período de análisis. Luego, las mismas irán ascendiendo muy paulatinamente debido a la rotación del viento al sector este y luego al norte.
Hay que destacar que en general será una semana con escasa nubosidad, que favorecerá a una elevada radiación solar en toda la región central del país, permitiendo que los excesos hídricos que se presentan en toda la zona GEA, escurran más rápidamente. Por otro lado, la circulación del viento en las capas bajas de la atmósfera se presentará muy variable a lo largo de la semana, y si bien prevalecerá del sector sur en los primeros días de pronóstico, luego rotará al sector este para finalizar la semana prevaleciendo del noreste o norte dependiendo de la zona. Esta rotación favorecerá el ascenso térmico pero recién hacia el miércoles de la próxima semana. En cuanto a la humedad en las capas bajas de la atmósfera, el jueves será el último día con elevado contenido de agua, ya que a partir del viernes ingresa una masa de aire con características más secas, que permitirá un fuerte descenso térmico en la zona central del país durante el fin de semana.