"Los canales de diálogo están abiertos"
Casamiquela indicó que "en las discusiones por cadenas de valor y territorios van a participar todos los sectores representativos de todo el país". Y agregó: "Los canales de diálogo están abiertos"
La producción de soja de la campaña 2013/14 será superior a los 49,3 millones de toneladas y la de maíz, mayor que los 32,1 millones de toneladas recolectados en la temporada previa, afirmó ayer el ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela.
En un encuentro con periodistas, el funcionario destacó la importancia de aumentar la producción de granos. "Estamos todavía en el proceso de siembra. Hay productores que están con indecisión en este momento entre el maíz y la soja", señaló el ministro, que no adelantó una cifra de producción de esos granos, pero sí vaticinó que crecerán respecto del ciclo pasado.
Casamiquela dijo que en la primera mitad de enero el Ministerio de Agricultura difundirá estimaciones oficiales para soja, maíz y trigo, y también de saldos exportables de los últimos dos cultivos, cuyos embarques están restringidos por las autoridades para garantizar el abastecimiento doméstico.
Consultado sobre la relación con la Comisión de Enlace, el funcionario indicó que "en las discusiones por cadenas de valor y territorios van a participar todos los sectores representativos de los productores de todo el país". Y agregó: "Los canales de diálogo están abiertos, lo que queremos discutir es en función de cadenas de valor y territorios, con todo el mundo que esté involucrado".
"Hay que analizar el funcionamiento de las cadenas de valor, pensando básicamente en sus extremos, desde el productor y el consumidor; para ello hay que analizar todos los eslabones, en especial la comercialización", continuó Casamiquela. Y agregó: "Otro enfoque es el del desarrollo territorial, las economías regionales; y bajar la expectativa de la escala, porque hay indicadores que son similares, pero los problemas centrales no son lo mismo".
"La idea es aumentar producciones y saldos exportables, y ser capaces de garantizar el consumo interno", enfatizó, y para ello -explicó- técnicos de Agricultura y Economía trabajan en el "diseño de un conjunto de instrumentos y herramientas de políticas públicas que permitan aumentar la producción en cada una de las cadenas y actores".
En el caso de la comercialización del trigo, Casamiquela afirmó: "Estamos trabajando en una apertura crítica del tema, pero es una cadena de fuerte raigambre pampeana, que si bien se destaca en la economía del país, conceptualmente es una economía regional igual que el resto".
"Hemos empezado a analizar trigo, maíz, girasol y carne, como prioridad ahora; tenemos 36 cadenas más en análisis, que incluyen los pesos relativos de cada una, porque algunas no tienen incidencia a nivel global pero son la clave de la supervivencia o desarrollo a nivel local", detalló.
Según Casamiquela, se van a "revisar y actualizar las metas del Plan Estratégico Alimentario, que son absolutamente coincidentes con las del último trabajo de CREA, en términos de potencialidad, y definir cómo arribar a esas metas".
También reclamó "una mirada un poco más integral para posicionar a la Argentina como proveedora mundial de alimentos, romper con el modelo tradicional de proveedora de materias primas, y seguir potenciando el valor agregado en origen que involucre a los pequeños y medianos productores, que demande mano de obra juvenil, que genere un modelo rentable diferente".
Consultado sobre los reclamos de algunos sectores, respondió: "En todas las cadenas, a algunos probablemente no les va bien, pero a muchos otros que no dicen nada les va mucho mejor". Y puso como ejemplo: "Dicen que la Argentina ha perdido stock, lo que es cierto, pero ha mantenido un nivel de stock perdiendo 14 millones de hectáreas que estaban dedicadas a la producción ganadera que ahora se dedican a la producción agrícola".
Según Casamiquela, "discutir las cadenas pensando que lo único que hay que discutir es rentabilidad es olvidarse que hay que discutir productividad, no en términos de eficiencia, sino de inclusión social y equidad, de desarrollo más integral de país".
Respecto de la relación con Brasil, Casamiquela reveló: "Me he reunido con el canciller (Héctor Timerman) para ajustar una agenda de trabajo, que incluya rediscutir con Brasil temas como citrus, pera y manzana", pero reclamó "mirar más la región, que la problemática bilateral".