Soja

A todo vapor

La lluvia es muy importante para las reservas hídricas y para asegurar un excelente arranque de la superficie ya sembrada

El cuadro adjunto muestra la proyección de resultados para la zona sur de Córdoba sobre la base de los precios estimados a cosecha 2014 para trigo, girasol, maíz y soja. Se presentan las cifras para los cultivos realizados por administración en campo propio y bajo la forma de arrendamiento en campos de terceros.

Luego de las lluvias de mediados de octubre, que posibilitaron el inicio de la siembra de granos gruesos, el último fin de semana se registró una lluvia de 80 mm que cubrió en forma homogénea toda la zona.

Este aporte de lluvia es muy importante para las reservas hídricas y para asegurar un excelente arranque de la superficie ya sembrada y de lo que aún se está sembrando. Se habría completado la siembra del 50% de la superficie planificada con soja de 1ª, que avanza a buen ritmo. 

Luego se completará la siembra de maíz tardío, cuya superficie supera por mucho a la del maíz sembrado tradicionalmente a fin de septiembre y principios de octubre. La siembra tardía, si bien resigna potencial de rinde, sirve para evitar que la etapa más crítica y sensible del maíz, que es la floración, ocurra en el mes de enero, en el cual hay mayores probabilidades de déficit y estrés hídrico.

Las lluvias llegaron tarde para el poco trigo que hay sembrado, que sufrió falta de humedad en invierno e inicios de la primavera. Se estima que los rindes promediarían 5 qq/ha.

Para cultivos sembrados por administración en campo propio, las proyecciones del cuadro muestran números complicados para el maíz y el girasol, con quebrantos en los rindes bajos del rango. El rinde de indiferencia para cubrir costos totales es de 72 qq/ha en maíz y 19 qq/ha en girasol. En trigo y soja de 2ª las proyecciones son casi nominales, dada la poca superficie sembrada con el cereal. El rinde de indiferencia del trigo es de 27 qq/ha, y en vista de los pobres rindes esperados tendrá un quebranto que no podrá ser revertido con la soja de 2ª, cuyo rinde de indiferencia se ubica en 17 qq/ha. En soja de 1ª, el rinde de indiferencia se ubica en 24 qq/ha. 

En campo arrendado la situación es más compleja, y tanto el maíz como el girasol proyectan quebranto en ambos rindes del rango. El rinde de indiferencia en maíz es de 84 qq/ha, y en girasol, de 25 qq/ha. La soja de 1ª sólo sale del quebranto con rindes superiores a 30 qq/ha.

Los arriendos se pactaron a precios más bajos que en la campaña pasada. Aumentó la proporción del precio a pagar en cosecha, con muchos negocios pactados con un mínimo adelanto en quintales fijos a cuenta de un porcentaje sobre el rinde. También hubo negocios directamente pactados a porcentaje. Aún quedan campos sin arrendar, que son los de menor potencial de rinde. 

La campaña viene difícil en lo financiero, con costos en alza. Por ahora el clima acompaña, pero harán falta más que buenos rindes para superar esta situación, que requiere, entre otras cosas, mercados transparentes, libre competencia entre el consumo interno y la exportación, reglas claras y precios que no estén recortados por las retenciones.