Comercio exterior

China avanza sobre la oferta argentina de carne

En septiembre fue el tercer destino de exportación de carne bovina

24 Oct 2013

El crecimiento del poder adquisitivo de la clase media china está transformando por completo la dinámica del negocio global de carne bovina. Uruguay fue el primero en anotarse en esa carrera. Argentina viene bastante lejos. Pero la locomotora asiática también está comenzando a cambiar el perfil exportador de la industria local.

En septiembre pasado las ventas argentinas de cortes bovinos frescos con destino a China (sumando Hong Kong) fueron de 1699 toneladas. Se trató de un volumen similar al remitido en ese mes a Israel (1651 toneladas) y Rusia (1651) y el tercero en importancia detrás de Europa (3003 toneladas incluyendo cortes Hilton) y Chile (2272). Es la primera vez en la historia de la ganadería argentina que ocurre algo así.

Los cortes enviados son en su mayor parte trozos de bajo valor económico. Pero la posibilidad de abrir un canal comercial en el mercado de alimentos más voraz del mundo no tiene precio.

La recuperación del stock ganadero y de la infraestructura frigorífica –algo que sucederá cuando cambie el escenario político interno– va a llevar varios años. Pero el dato es que, a pesar del escaso saldo exportable argentino, la demanda asiática está, en términos relativos, comenzando a pisar fuerte en el negocio exportador local de carne vacuna.

En los primeros nueves meses de 2013, según datos del Senasa, las exportaciones argentinas de cortes bovinos frescos (incluyendo cuota Hilton) fueron de 99.072 toneladas, de las cuales 24.518 se destinaron a la Unión Europea, 22.826 a Chile, 16.847 a Israel, 13.950 a Rusia y 7832 a China.

En enero-septiembre de 2013 la Argentina exportó carne aviar fresca por 206.234 toneladas. Es decir: en los primeros nueve meses de este año por cada 2,08 kilos de carne de pollo se exportó apenas uno de carne bovina.

La cuestión es que la mayor parte de los envíos de pollos (108.924 toneladas) se remitieron a Venezuela, a precios superiores al promedio, en el marco de acuerdos realizados entre funcionarios bolivarianos y kirchneristas.