Uruguay

La ganadería en un buen momento

La ganadería uruguaya se ha transformado en altamente especializada y está produciendo para mercados segmentados

18 Oct 2013

La ganadería uruguaya se ha transformado en altamente especializada y está produciendo para mercados segmentados, línea en que se debe profundizar, dijo Fabio Montossi, director del Programa Nacional de Carne y Lana del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA).

Luego de su disertación en la  jornada Destacados INIA, realizada en INIA Tacuarembó –denominada Ganadería del Norte para el siglo XXI–, el investigador resaltó el interesante proceso de cambio que ha vivido la ganadería uruguaya en los últimos 20 años.

Explicó que esa evolución es producto de los cambios tecnológicos y de la competencia por la tierra que tiene la ganadería con otros rubros altamente rentables.

Como consecuencia, la ganadería fue desplazada a los campos del norte del país, pero nunca representó una disminución del stock ganadero, dijo Montossi.

Explicó que todo esto llevó al gran cambio en la manera de producir carne y lana en Uruguay, lo que se puede simplificar en conceptos de especialización, intensificación, mejora de la eficiencia productiva, de la diversificación y la búsqueda de sinergías con otros sectores rentables, como la forestación y la agricultura.

Uruguay opera con buenos precios, con mercados donde importa la calidad del producto y también el proceso productivo, tanto de valor intrínseco (terneza, color y diámetro de la fibra de la lana) como extrínseco (como se produce esa lana o esa carne).

Según Montossi, lo extrínseco puede ser cómo produce la lana o la carne, donde “Uruguay tiene alternativas que van desde la carne orgánica, la Hilton a pasto y la Cuota 481 a grano”. Por lo tanto se está en un momento donde se puede trabajar en base a genética, producción y mercados.

Uruguay no está vendiendo commodities, sino que está vendiendo una diversidad de productos en diferentes mercados.

Uruguay produce carne orgánica, carne a pasto, carne a grano, lanas superfinas, ultrafinas o sistemas de alta producción de doble propósito de carne ovina, “y lo que tenemos que reconocer es que tenemos mercados distintos para productos y que los sistemas de producción son bien diferentes. Es decir, todo pasa por un sistema de especialización y seguramente por un proceso hacia la certificación de los productos. Uruguay se tiene que posicionar con vistas a este nuevo tiempo de los mercados mundiales, aseveró Montossi.

El investigador de INIA insistió en el concepto de especialización. Explicó que por ejemplo “no veo al Uruguay con más ovejas, sino prácticamente con las mismas ovejas que tenemos hoy, pero produciendo mayor valor agregado a través de una mayor eficiencia y calidad de productos que genera” y agregó que “tener menos ovejas no necesariamente significa tener menos plata”.

Montossi agregó que “eso es lo que ha pasado en Nueva Zelanda y Australia. En 20 años redujeron prácticamente entre 40% y 50% sus stocks; sin embargo, siguen produciendo igual o más carne, y además le están agregando más valor que hace 20 años. Creo que ese proceso tiene que llegar al Uruguay”.

Trazabilidad

Según el experto del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), FabioMontossi, la trazabilidad ganadera implementada por Uruguay  tiene una incidencia fundamental en la mejora de la productividad ganadera del país. Explicó que esa herramienta es un gran puente para poder llevar los conceptos de calidad y de confianza del producto, y de seguridad alimentaria. Por lo tanto su gran desafío ya no es lo sanitario y de marketing, sino que  además se transforma en un recurso clave para mejorar la gestión dentro de los propios establecimientos rurales, más allá de su utilidad aplicada al manejo sanitario de los predios.