Panaderos protestarán el martes contra la suba de la harina
Los panaderos de Rosario se concentrarán el martes próximo en Corrientes y Córdoba para protestar por el aumento de la harina y la escasez de este insumo
Durante una concurrida y caliente asamblea en la sede de la Asociación de Industriales Panaderos, los empresarios del sector descargaron su bronca y se quejaron porque ninguna autoridad escucha sus reclamos.
"Con el aumento de la harina, y la instrumentación de cupos para conseguirla, el pan se va a ir a 20 pesos el kilo y no sabemos hasta dónde va a llegar", señaló Gerardo Di Cosco, titular de la entidad.
El dirigente advirtió además que los panaderos empezaron a sentir en el nivel de actividad la caída del consumo, lo cual amenaza también los puestos de trabajo.
Precios de escasez
Mientras en el mercado de granos el trigo cotiza a precios siderales, la bolsa de 50 kilos de harina trepó ayer a casi 400 pesos el kilo. En febrero, costaba 90 pesos.
Ya a mitad de año, luego del brusco salto que pegaron los precios en la primera parte de 2013, el gobierno nacional intervino y tejió un acuerdo para que los molineros mantuvieran el precio hasta diciembre, cuando entra el trigo de la nueva cosecha.
Los industriales molineros se comprometieron también a entregar harina a precio más bajo para elaborar un pan social de 10 pesos el kilo.
Tal como lo denunció Di Cosco, ese acuerdo se cayó de hecho a fines de septiembre, cuando la harina volvió a saltar otro escalón. Ayer llegó al precio máximo de 390 pesos y los panaderos se enfurecieron.
Es que no pueden contener la suba del pan y deben dar la cara ante los consumidores. Pero además, la suba repercute en el nivel de ventas, y de la actividad. A diferencia de lo ocurrido a mitad de año, sus reclamos no encontraron eco en esta ocasión. "Nadie nos escucha y la gente a va a terminar pagando 25 pesos el kilo de pan, esto es una locura", se quejó ayer Di Cosco, quien consideró que la protesta del martes próximo será la primera de una serie hasta que su reclamo encuentre eco.
Para algunos analistas, la solución es importar trigo hasta fin de año. Mientras tanto, añadió, "la única herramienta que nos queda es comprar lo mínimo posible de harina para no convalidar estos precios".