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Cada vez más importante

En una ganadería que se intensifica, la calidad del agua de bebida cobra cada vez más relevancia ya que los alimentos tienen más materia seca que una pastura y el consumo aumenta notablemente

El lado sólido del agua

El agua es necesaria para todos los procesos de producción, no sólo por su función  hidratante, sino también por los elementos que presenta dentro de la fracción sólida calculada como sólidos totales disueltos (STD) en g por litro. La determinación de sólidos disueltos totales mide específicamente el total de residuos sólidos filtrables (sales y residuos orgánicos) a través de una membrana con poros de 2.0 µm (o más pequeños).  

El agua con un STD menor que 1,000 mg/L es aceptable para toda clase de ganado. Entre 1,000 y 7,000 mg/L los efectos del STD son menos precisos y pueden variar de ningún efecto notable a diarrea temporal y a productividad atenuada. Si el STD está entre 7,000 y 10,000 mg/L, serios problemas de salud pueden desarrollarse, y puede ocurrir un rechazo al agua por parte del ganado. Aguas con un STD sobre 10,000 mg/L no deberían ser utilizadas para consumo animal. En el país la cantidad promedio de STD varía entre 4140mg y 800mg por litro en las principales cuencas lecheras. Sin embargo la cantidad y composición química de los STD varía notablemente de acuerdo a la profundidad en que se haga la extracción de agua.

En los sistemas de ganadería intensivos, el agua toma un rol cada vez más importante debido a que cada vez se brindan alimentos más concentrados y digestibles y menos aguachentos. Según la Cámara Argentina de Feedlot, el sistema de engorde a corral, actividad que lleva más de 20 años desarrollándose en el país, se ha convertido en uno de los más importantes abastecedores de carne. Mientras que en el año 2001 aportaba a la faena nacional 1.5 millones de cabezas, en el 2009 se llegó a cerca de 5 millones. En este contexto los animales requieren más agua y de mejor calidad para satisfacer sus requerimientos.

 

Calidad del agua: ¿Qué parámetros físicos químicos se deben tener en cuenta?

Para conocer las características del agua no alcanza con especificar la cantidad de STD expresados en gramos por litro. El análisis del tipo de minerales presentes en esta fracción nos permite determinar con más precisión qué calidad tiene la misma.

Los iones más frecuentes en aguas salinas son los sulfatos (S04 --), el Cloro (Cl -), el carbonato COH3 y bicarbonatos HCOH3 y los cationes, Magnesio (Mg +), y Calcio (Ca ++) y el Sodio (Na +). En general las sales que tienen mayor efecto adverso sobre la calidad de agua son los sulfatos de Na y de Mg otorgándoles sabor amargo y propiedades purgantes. Los Cloruros aparecen como sales de Na, Ca o K. El CINa como sal común es un componente beneficioso como aporte de Cloro y Sodio a la dieta siempre y cuando no esté en exceso. El CIMg y CI2Ca generan sabor amargo y diarreas.

Por otro lado, los carbonatos y bicarbonatos no tienen efectos negativos conocidos y en general son las sales más abundantes en aguas de buena calidad junto al Ca y al Mg y podrían ser beneficiosas a la hora de hacer de buffer en el rumen.

La presencia en exceso de algunos componentes que no son esenciales para el animal como el Arsénico o Mercurio pueden producir efectos muy adversos en la salud del rodeo y sus límites de toxicidad están bien determinados.

Tolerancia

El nivel de tolerancia a las concentraciones salinas es variable, siendo la cría la más tolerante. En el tambo se presentan disminuciones visibles de la producción y otros problemas con altas concentraciones de determinadas sales (ver tabla)

Es importante remarcar que no existen cantidades óptimas de SDT en el agua ya que dependerá mayormente del tipo de dieta consumida por el animal. En este sentido, dietas con heno de alfalfa (Medicago Sativa) o heno de pasto llorón (Eragrostis Curvula) tuvieron distintas performances de acuerdo a la cantidad y tipo de SDT. Aguas con más cantidad de SDT estimularon el consumo  y lograron una mayor digestibilidad de heno de pasto llorón que aguas de mejor calidad. Sin embargo cuando se alimentó a los animales con heno de alfalfa, las aguas de mejor calidad observaron una mayor digestibilidad del alimento.

El agua es un recurso cada vez más escaso en el mundo, y es responsabilidad de todos cuidarlo buscando sistemas sustentables que hagan más eficiente su uso. Una de las herramientas es conocer sus características físico químicas para poder cuantificar los nutrientes que aporta, y de esta manera evitar su desperdicio.

Datos obtenidos en el Congreso CAENA 2013 - Juan Pablo Russi - Por Gisela Aghemo