Camelina, el cultivo disruptivo que revoluciona el agro argentino y la producción de Biocombustibles

 Chacra TV habló con Martín Beaudeant, Gerente de Producción de Chacraservicios, quien se refirió al novedoso cultivo de camelina; innovador y sostenible. Es un cultivo rústico, adaptable a bajas precipitaciones, suelos menos fértiles y resistentes a heladas, lo que lo hace ideal para zonas con condiciones difíciles. Además, requiere menos agroquímicos, ayudando a regenerar los suelos. En 2024 se cosecharon 25 mil hectáreas, con la meta de alcanzar 50 mil en 2025. Este crecimiento responde a la demanda de la industria aeronáutica, interesada en biocombustibles renovables. Para exportar, el cultivo debe certificarse, asegurando bajas emisiones y cumpliendo con estándares internacionales.

Este cultivo tiene beneficios económicos y agronómicos, favoreciendo la rotación de cultivos y la sustentabilidad.

"Venimos hace años trabajando en el proyecto de camelina y cada año vamos incrementando la superficie, vamos teniendo más productores que se van sumando a este cultivo nuevo, una innovación para el agro argentino", sostuvo Beaudeant y explicó que fue un año más que importante porque "estamos cerrando la cosecha de lo que se sembró este año".

Cabe destacar que la camelina es una brásica, de la familia de la colza, que entra muy bien en Argentina dentro del momento que no hay cultivo sembrado. "Es un cultivo que viene a reemplazar a un barbecho químico o a un cultivo de cobertura", explicó el ejecutivo de la compañía. De esta manera, la camelina aporta a la intensificación, a mantener los suelos todo el año cubierto y raíces trabajando. Además, es un cultivo muy rústico, se adapta muy bien a bajas precipitaciones, a suelos no del todos fértiles, y este año demostró que es muy resistente a las heladas. "En zonas más complicadas, que no llueve mucho en invierno, es una opción muy válida para los productores, porque ahí sí le estás dando más allá de un cultivo de cobertura con renta, un cultivo en sí mismo", explicó.

Por otro lado, Beaudeant, opinó acerca de la adopción de los productores en este novedoso cultivo para nuestro país. "Es como todo nuevo, hay que salir un poco de la zona de confort, estamos acostumbrados a hacer commodities", señaló el Gerente de Chacraservicios y explicó que la "camelina es una semilla muy chiquita, hay que volver a hacer un poco más de agricultura, a tener mucha precisión en la siembra, en la cosecha, un cultivo muy simple de llevar adelante, pero hay que tener en esos momentos puntuales, al ser un grano pequeño, mucha atención".

En ese sentido, Beaudeant destacó: "Contamos, en Argentina, con productores y contratistas que le encuentran la vuelta, que son apasionados, cuando del otro lado están las ganas, es todo más fácil".

Además, Beaudeant destacó que la camelina ayuda "a desintoxicar un poco los suelos porque usa muy pocos agroquímicos, hoy no tiene plaga ni enfermedades, o sea que no usas ni fungicida ni insecticida" y sostuvo que "venimos a dejar de usar los herbicidas tradicionales, a poner otros principios activos, que es uno solo que usamos en el momento de la siembra y generar raíces". Tener un suelo todo el año vivo, es decir mantener el invierno cubierto, tener raíces vivas, generar cobertura, competir con malezas, ayudar a la fauna que hay en el suelo.

A su vez, el ejecutivo de la compañía habló acerca de la campaña que está terminando. "Venimos creciendo fuerte en hectáreas, haciendo mucho foco en el acompañamiento al productor, terminando la cosecha, pero ya pensando en la siembra que se viene en seis meses", señaló Beaudeant.

En ese sentido, haciendo referencia a las expectativas para el 2025, el ejecutivo de Chacraservicios contó que están creciendo por dos la cantidad de hectáreas. "Este año hicimos unas 25 mil hectáreas y el año que viene, sería la idea hacer unas 50 mil, el doble de hectáreas", contó y aseguró que es un desafío importantísimo de enseñar el proyecto, mantener a los productores que vienen acompañando hace cuatro campañas.

"Es vital el vínculo con el productor, ya nos empieza a conocer y al otro año está convencido de que el cultivo anda, que la empresa lo acompaña. En ese sentido el contagio es mucho más fácil porque esto es boca a boca". Es importante señalar que la camelina es apta para toda la región núcleo de Argentina y, actualmente, se encuentran desarrollando ensayos en el NEA y la Patagonia.

El negocio 100% de la camelina es para biocombustibles. "La industria aeronáutica es la que más está demandando este tipo de biocombustibles renovables de segunda generación, hoy la demanda está totalmente insatisfecha, tenemos un plan a varios años muy fuerte de crecimiento de hectáreas porque la demanda nos pide mucho más de lo que estamos produciendo", contó Beaudeant.

A su vez, habló de la certificación del cultivo. "No podemos contratar un lote para hacer camelina si no logramos certificar", dijo el ejecutivo de la empresa y contó que es muy simple, lo hace Chacraservicios a través de su departamento de certificaciones, pidiendo la ubicación satelital del lote al productor y ver si certifica para Europa o Estados Unidos, que son los que están pidiendo esas certificaciones para poder entrar con el aceite a esos continentes. Además, explicó que necesitan demostrar que tienen emisiones muy bajas a diferencia de un combustible fósil que es lo que están usando hoy las industrias.

Finalmente, el ejecutivo de la empresa sentenció: "Es un cultivo totalmente disruptivo, es algo que no es tan acostumbrado a hacer, cuando ve que le ofrecés un cultivo que además de la renta financiera tiene una renta agronómica vemos que el ‘por qué lo haría sin pensarlo'" y explicó que "es un cultivo que entra muy bien en la rotación, que beneficia al cultivo que le sigue porque tiene muy bajo consumo de agua. Las expectativas para adelante son todas, pero siempre haciendo foco en la cercanía con el productor".