El pecán en Argentina: oportunidades de exportación y retos en su producción
Pablo Barone, vicepresidente ejecutivo de la Cámara Argentina de Productores de Pecán , dialogó con Frutos del País por Chacra TV sobre la historia, el crecimiento y las perspectivas de este fruto seco en Argentina.
Con una trayectoria en constante expansión, el pecán se ha consolidado como un producto clave tanto en el mercado interno como en el internacional.
"El pecán y la nuez de Castilla son botánicamente primos, pero con orígenes distintos. La nuez de Castilla es originaria de Europa, mientras que el pecán proviene de la cuenca del río Mississippi", explica Barone, resaltando la particularidad de este fruto, que destaca por su sabor más intenso y propiedades nutricionales. Según Barone, los primeros árboles de pecán llegaron al país entre 1840 y 1850, aunque su producción con fines comerciales comenzó recién a fines de los 90, cuando se introdujeron variedades demandadas por el mercado internacional.
Actualmente, la producción de pecán se extiende desde Jujuy hasta Río Negro, con una mayor concentración en Entre Ríos y el norte de Buenos Aires. Este cultivo, que requiere una inversión inicial significativa en plantas y sistemas de riego, alcanza su madurez plena a los 15 años. A pesar de su creciente popularidad en el mercado local, el pecán sigue enfrentando desafíos para consolidarse como un proveedor regular de calidad en los mercados internacionales.
En cuanto a la exportación, el pecán argentino ha logrado penetrar mercados clave como Estados Unidos, Europa y China. Sin embargo, el acceso a China está condicionado por la implementación de un protocolo sanitario, actualmente en proceso de negociación entre ambos países. "El mercado chino consume pecán con cáscara, mientras que Europa y Medio Oriente prefieren el producto pelado", aclara Barone, destacando la importancia del agregado de valor en la producción.
Los productores de pecán en Argentina enfrentan además desafíos en términos de logística y control de calidad. La Cámara de Productores, que reúne a más de 180 productores de diversas escalas, trabaja para mejorar la tecnología de producción y facilitar la exportación asociativa, permitiendo a pequeños y medianos productores obtener mejores precios y acceder a mercados de alta demanda.
"El gran desafío para el pecán argentino es ser reconocido como un producto premium de calidad constante. Estamos en una etapa de consolidación, tanto en la producción como en la percepción del mercado global", concluye Barone, señalando que la mejora continua en los rendimientos y la calidad del pecán será clave para su éxito en el competitivo mercado internacional.