Sorgo Manejo

¿Qué tanto sabe usted de este cultivo?

Saltó a los primeros planos a raíz de los problemas sanitarios con el maíz. Tiene requerimientos concretos para arribar a buenos resultados. Fecha de siembra y densidad bajo la lupa.

El achaparramiento del maíz puso en duda la suerte del maíz tardío durante la campaña 2024/25. Y aunque ahora la cuestión sanitaria de este cultivo va a encontrar a todos mucho mejor preparados, surge el sorgo como alternativa económica competitiva a la hora de diversificar riesgos. Eso sí, es necesario conocer las oportunidades y riesgos de generar cambios poco usuales en los planteos.

Plástico y tolerante a ciertas adversidades, el sorgo suele ser condenado a ambientes con limitantes, pero también produce adecuadamente en contextos de alto potencial ante condiciones circunstancialmente adversas. Lo que debemos hacer es identificar los ambientes con ventajas para este cultivo y recurrir a híbridos modernos con alto potencial de rendimiento.

Su mayor tolerancia al estrés hídrico se debe a que mantiene su demanda de agua por debajo del umbral del maíz en todos sus estadios. Importa dentro de la rotación por la capacidad exploratoria de sus raíces, su versatilidad, su tolerancia a suelos degradados (salinidad, alcalinidad, pobre drenaje o directamente inundables), su performance en una sequía (por su sistema radicular, el ajuste osmótico y la latencia del periodo reproductiva), además de una producción estable y menores riesgos en cuanto a precios y adversidades climáticas inesperadas.

Asimismo ofrece buena cobertura del suelo, mayor eficiencia de uso del agua, alto aporte de biomasa aérea y subterránea con elevada relación carbono/nitrógeno, con lo cual mejora las propiedades físico-químicas y biológicas del perfil, a favor de la materia orgánica del suelo.

China es lejos el mayor comprador e impone muchas regulaciones en cuanto a la calidad del grano: menos de un 15% de humedad, sin picados, etc.; son muchos los factores que hay que tener en cuenta. Entre los oferentes los grandes rivales son Estados Unidos y Australia, que también batallan por el mercado chino. El año pasado la Argentina fue responsable del 15% de las exportaciones globales.

Lucía Rosetti, de la EEA INTA Rafaela, provincia de Santa Fe, explica que el rendimiento medio del sorgo en la zona es superado por el maíz temprano, pero se ubica en el mismo nivel del tardío, y puede ser más fácil lograr 4800 kg de sorgo que 6800 de maíz tardío para arribar a un mismo margen.

Datos vitales

En principio, es importante caracterizar el ambiente lote por lote y adaptar las decisiones a eso. A partir de ahí podemos manejar el antecesor, la fecha de siembra (FS), la densidad, los nutrientes, el arreglo espacial y el control de adversidades biológicas. Conviene cuantificar todo esto para ver qué variables vamos a ajustar para mejorar los rindes.

Un primer dato indica que el sorgo no compite bien con las malezas en los primeros 30 días, y hay que cuidarlo en ese momento. Es muy importante la disponibilidad de agua útil y la temperatura del suelo. A medida que avanzamos en el ciclo del cultivo aparece la radiación como un elemento relevante para el desarrollo de las plantas. Por lo demás, el periodo crítico se da 20 días antes y 20 después de la floración; las condiciones tienen que ser las mejores, especialmente la disponibilidad de agua. Luego, durante el llenado del grano, importan la radiación y la temperatura.

El sorgo es muy sensible al frío. Temperaturas por debajo de 10ºC afectan la germinación y la emergencia, y si se trata de un cultivo ya nacido provocarán menor fotosíntesis por reducción del área foliar. "Necesita 15 a 18ºC como temperatura de suelo, al menos tres días consecutivos de 16ºC promedio para evitar una mala emergencia y desuniformidad del planteo, menor stand de plantas y rindes penalizados", subraya Rosetti.

A medida que aumenta la temperatura disminuyen los días a emergencia. La temperatura óptima para el cultivo son 30ºC y el umbral de temperatura máxima es 42ºC. Desde luego el momento e intensidad en que se produce un estrés térmico es clave. Temperaturas por arriba de 30ºC en el periodo crítico van a afectar el proceso reproductivo, la germinación del polen, y la formación de la semilla.

A no confundirse, el sorgo es tolerante a deficiencias hídricas pero tiene altos requerimientos respecto del agua para pensar en rindes elevados. Esta demanda empieza a aumentar después de los 30 días de sembrado y es máxima en encañazón y floración. En cuanto a su tolerancia a la sequía, obedece a un mecanismo natural de latencia, que utiliza como estrategia de escape. Con 400-600 mm durante el ciclo muestra alta productividad, con 350 mm se puede pensar en rendimientos medios y hasta 250 mm se habla de una producción mínima rentable.

Los rindes caen en las campañas secas, pero mucho más en las temporadas muy húmedas. "Los pronósticos ahora son de año Niña, y las estadísticas muestran buena respuesta ante este tipo de fenómenos para el sorgo", aporta la especialista del INTA.

Decisiones de peso

La FS es una práctica de alto impacto y define muchos factores que determinan el rendimiento: el ambiente en cuanto a temperatura y radiación, la disponibilidad hídrica y la chance de ejercer presión sobre determinadas adversidades. Asimismo determina el momento en que ocurrirá el periodo crítico, que debe estar relacionado con las mejores condiciones ambientales y el uso eficiente de los recursos (entre diciembre y febrero para el centro de Santa Fe, aunque lo ideal sería evitar enero).

Para definir la FS se debe tener en cuenta el periodo libre de heladas. El sorgo es muy sensible a ellas, y este parámetro define la ventana de siembra disponible. Lo que sigue es la temperatura del suelo y contar con agua útil -es vital arrancar con un perfil recargado-. Finalmente, el antecesor también juega.

Los mejores rendimientos se dan en FS fines de octubre y primera quincena de noviembre. Atrasarse implica perder kilos, adelantar equivale a resignar algo de rinde, aunque todo depende del estrés que el cultivo haya tenido.

En cuanto al antecesor, este afecta la disponibilidad de agua y los nitratos en el perfil al momento de la siembra. El periodo de barbecho para el sorgo es el que cada antecesor permite al desocupar el lote. Soja y girasol son los mejores en este sentido, también una pastura.

La densidad va a depender de la FS, el ambiente, el tipo de suelo, la fertilidad y el agua disponible. Por caso, un ciclo largo demanda 160 mil plantas a cosecha, 7-8 pl/m a 52 cm. Para un ciclo intermedio serían 180 mil plantas a cosecha, 8-9 pl/m, y para un ciclo corto 220 mil-260 mil plantas a cosecha, 10-11 pl/m. Se busca un planteo ofensivo en densidad para un año normal y defensivo para un año seco.

Es importante elegir correctamente el híbrido. Primero, por el uso -granífero, forrajero, silero, doble propósito-. Luego juega el largo del ciclo relacionado con la FS -tener en cuenta días a floración y a cosecha-, más la tolerancia/resistencia a insectos, el comportamiento sanitario, la performance productiva, la capacidad de macollar, la altura y el porte, y la forma de la panoja y la excersión.

Por cierto, el análisis genotipo por ambiente es una herramienta que permite posicionarse de acuerdo con lo que se espera de la campaña mediante un índice ambiental, y ayuda a seleccionar el híbrido que mejor se adapta. Se obtiene una pendiente de rendimiento en función de dicho índice ambiental: los materiales cuya pendiente es igual a 1 son aquellos que se comportaron bien en todos los ambientes. Cuando resulta menor a 1 indica híbridos de buen comportamiento en ambientes de alta calidad. Por arriba de 1 quedan los materiales que sobresalieron en ambientes con limitaciones.

Insectos

La principal plaga es el pulgón amarillo (Melanaphis sacchari). Ataca en todos los estadios con infestaciones elevadas y de manera explosiva. Se ubica en el estrato inferior de la planta y el envés de las hojas, lo que dificulta el control. Genera una melaza que complica la cosecha y reduce la eficiencia de la fotosíntesis. En general hay retención de panoja; el sorgo no florece. Conviene recurrir a umbrales y monitorear las primeras etapas vegetativas, más el control del hospedero (Alepo).

El gusano cogollero (Spodoptera frugiperda) ataca en estados vegetativos tempranos. Es de difícil control por ocultarse en el cogollo. No hay eventos disponibles, se recomienda trabajar con un umbral del 4-5% de plantas infestadas.

La mosquita del sorgo (Stenodiplosis sorghicola) se presenta de inicio a final de floración. La hembra pone huevos en las flores, y la larva se alimenta del grano e impide su formación. Se requieren híbridos de floración uniforme, siembras tempranas -evitar el pico poblacional-, no hacer siembras escalonadas y controlar el sorgo voluntario.

Finalmente, el siete de oro (Astilus astromaculatus) presenta daños directos sobre la panoja en floración. Come el polen o bien grano en estado lechoso.

Estrategias recomendadas

Rosetti diferencia tres alternativas. En principio una estrategia defensiva. Se corresponde con ambientes por debajo del promedio, siembras más tardías para minimizar riesgos climáticos, y una densidad reducida en proporción al ambiente esperado. La idea es optar por un híbrido plástico, de alta tecnología.

En la otra punta se ubica una estrategia ofensiva. Se vincula con un ambiente arriba del promedio. El consejo es optar por siembras más tempranas para aprovechar las condiciones del lote. Aumentar la densidad e ir por un híbrido de alto potencial, apuntando a rendimiento y rentabilidad. Siempre conviene evaluar riesgos.

¿Qué elegir? Para esta profesional, la previa de esta campaña recomienda ir por un planteo conservador. En ambientes promedio, aguardar una buena recarga del perfil para decidir sembrar. Mantener/adecuar la densidad, escoger un híbrido estable, con buena adaptabilidad y mayor tolerancia a estrés, para minimizar los riesgos y maximizar la estabilidad del rendimiento.