Se exportaron a Brasil más de 129 toneladas de uva y ciruela en fresco sin bromurar
En el marco de la campaña de exportación de uva y ciruela en fresco con destino a Brasil, con origen en San Juan y Mendoza, certificadas libre de Lobesia botrana por Senasa.
En el marco de la campaña de exportación de uva y ciruela en fresco con destino a Brasil, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) certificó, en San Juan y Mendoza envíos de las frutas por más de 129 toneladas a través de su Sistema Integrado de Medidas Fitosanitarias para la Mitigación del Riesgo (SMR) de la plaga Lobesia botrana.
Agentes del Centro Regional Cuyo del Senasa, pertenecientes al Centro de Operaciones de Campo (COC) de Lujan de Cuyo, Mendoza y las oficinas de General Alvear y Tunuyán (Mendoza) y de San Juan aprobaron, en frigoríficos de sus respectivas provincias, el despacho de cargamentos de uva y ciruela en fresco luego de un minucioso proceso de control y seguimiento que permitió su transporte al país vecino, indicó el Senasa en un comunicado.
Las campañas se iniciaron en agosto de 2023, cuando los productores registraron ante el Senasa sus establecimientos y tramitaron la documentación solicitada para la inscripción al SMR, protocolo que les permite exportar sus frutas frescas sin la necesidad de aplicar el tratamiento cuarentenario de bromuro de metilo.
Este sistema tiene como requisito que la fruta no presente, durante el proceso de producción (desde el campo hasta el empaque), estadíos inmaduros y/o adultos de la plaga Lobesia botrana.
"Durante la campaña, la Dirección de Sanidad Vegetal de San Juan y el Instituto de Sanidad y Calidad Agroalimentaria de Mendoza (Iscamen) asistieron a los productores inscriptos en el SMR con productos fitosanitarios autorizados por el Senasa para realizar las aplicaciones requeridas para el control biológico de la polilla", indica el comunicado.
Entre otras acciones sanitarias para el control de la plaga, se instaló la red de trampeo y los difusores con feromonas en sus fincas, necesarios para implementar la Técnica de Confusión Sexual (TCS).
El proceso de seguimiento por parte del Senasa implicó la fiscalización de todas las tareas mencionadas; una prospección a campo previo a la cosecha de las frutas, para determinar la ausencia de estadíos inmaduros de la plaga; y la toma de muestras en cada partida (en uvas), para análisis de laboratorio.