Agricultura

Entre el 70% al 90% de la producción de ajo se exporta

A partir del trabajo de la red en cultivares de ajo se promueve el cultivo en el Valle de Lerma y Valles Calchaquíes. Cada productor elige los distintos tipos de variedades que se adecuan al ambiente para poder entrar al mercado exportador.

 El Ingeniero Agrónomo Alejandro Melis del INTA Salta, habló sobre las variedades, mercados, cultivares. A partir de difusión de cultivares de ajo que se da en Argentina los productores se van motivando a incorporar este cultivo en su esquema de producción. El año pasado, en Valle de Lema, aunque aún se encuentran en etapa de análisis de rendimiento, notaron que algunos cultivares se han comportado de buena manera.

"Si bien en Valle de Lerma hay productores que están incursionando en el cultivo de ajo, este año vamos a instalar dos parcelas de evaluación de la red en Valles Calchaquíes, uno en la zona de Cachi y la otra en San Carlos", contó Melis y sostuvo que "creemos que el ambiente de Valles Calchaquíes acompaña más a lo que es la historia de selección de los materiales del INTA ya que es una zona similar".

Por otro lado, Melis contó que la experimental del INTA en Mendoza son quienes llevan adelante el cultivo de ajo comenzando en la década del 80' y hoy continúa.

"El año pasado tuvimos 11 cultivares de ajo en evaluación, tenemos ajos morados, colorados, castaños, blancos, y en esa diversidad es que hacemos la evaluación para ver, de acuerdo al ambiente que le ofrecemos en estos lugares, cómo se comportan y si realmente esas características que los mejoradores han ido incorporado se manifiestan o no en estos ambientes", explicó el ingeniero del INTA.

Entre el 70% al 90% de la producción argentina de ajo se exporta, siendo Brasil el principal importador que consume ajos de tipo colorado y Europa, principalmente España, importa ajos de tipo blanco. "El productor va acomodando su esquema productivo a qué materiales va haciendo para ofrecer a los distintos mercados", destacó Melis y contó que "este año, la producción ha sido abundante y quedó mucho ajo en el mercado nacional, lo que hizo que los precios estén bajos".

Por último, el ingeniero del INTA destacó que "tener estos sitios de evaluación posibilita que el productor tenga a mano qué materiales se adapta a cada ambiente, ajos tempranos, semi tardíos y tardíos, y acomodar cómo puede entregarlo al mercado".