Mejora el caudal del Río Paraná
Tras dos años y medio de bajante, las lluvias en el sur de Brasil durante octubre permitieron que el principal canal de navegación por donde se exportan los granos argentinos recupere parte de su caudal.
El caudal del río Paraná cortó una seguidilla de meses en baja, porque abundantes lluvias que se registraron en la cuenca alta, sobre territorio brasileño, generaron una crecida positiva en la principal vía de navegación de la Argentina. Primero se vieron imágenes de las Cataratas del Iguazú, cuando por allí pasó un gran caudal de agua. Ahora, está llegando al norte de la provincia de Buenos Aires y sur de Santa Fe, rumbo al Río de la Plata.
Incluso, ese volumen hídrico ayudó a recuperar la biodiversidad en la zona de las islas entrerrianas. Sin embargo, todavía se necesitan lluvias luego de los incendios que arrasaron esos frágiles territorios. Porque, dos años y medio de bajante del río Paraná generaron un impacto tanto en la navegación, en los puertos cerealeros, como en la fauna y la flora.
Desde el Instituto Nacional del Agua (INA), explicaron que "si bien las condiciones son en general mejores que las observadas en 2020 y 2021, la perspectiva climática aún no permite establecer un límite temporal del escenario de aguas bajas predominantes, iniciado en marzo de 2020. Son tendencias consideradas en los valores medios diarios, los niveles se registran dentro del rango de aguas medias.
El río Paraná se acercó a los 3 metros, es su máxima altura en más de tres años.
Durante el 2020 y 2021 la bajante trajo problemas para el embarque de los granos en los puertos de cereales. Ahora, en la zona de islas se observa que el agua va ingresando por arroyos y canales, y además se están trasladando animales en busca de mejores pasturas hacia territorio entrerriano.
Juan Galarza, prefecto de la Prefectura de Ramallo, en el norte bonaerense, destacó: "Hemos tenido un repunte a raíz de las lluvias en la cuenca norte, en Brasil, se dio un abundante caudal de precipitaciones. Fueron muy importantes y han repercutido mucho porque empezó a ingresar agua en las zonas bajas, en el interior de las islas, en las lagunas. Y es muy importante para la biodiversidad. Con esta crecida va a reverdecer todo, va a mejorar la fauna y la flora".
Se espera un leve descenso durante las próximas semanas, pero por el momento el ingreso de agua es sostenido. Tuvo más repercusión por las lluvias en el norte del país. En la zona del Delta, por la tipografía, la crecida del río es menos visible y más acotada".
"El año pasado, por la bajante histórica, se produjeron varaduras y la navegación se volvía muy peligrosa para los barcos. Hoy hay mayor seguridad. Estamos por debajo de lo ideal, faltaría un poco más pero es un repunte importante", sostuvo Galarza.
El río Paraná se acercó a los 3 metros en Rosario y es su máxima altura en más de tres años. El registro exacto de Prefectura marcó 2,93 metros, el pasado lunes. Se trata del más elevado del año. Hay que remontarse a agosto de 2019 para encontrar una marca superior.
Las características extraordinarias de la bajante del río Paraná, que se registra desde hace 3 años, impuso la realización de permanentes análisis por parte del INA. Hicieron evaluaciones climáticas, meteorológicas, hidrológicas e hidráulicas, entre otras. Sobre esa base, el organismo brinda diversas categorías de informaciones, tales como los "Pronósticos de corto y mediano plazo" y los "Escenarios de largo plazo".
Tanto para el litoral argentino como para las cuencas de los grandes ríos de la cuenca del Plata, se espera un trimestre con condiciones levemente deficitarias o normales. La mayoría de los modelos indican que persistirán las condiciones de La Niña al menos durante el último trimestre de 2022.
La bajante del río Paraná, de características extraordinarias por su magnitud y persistencia, seguirá siendo motivo de especial monitoreo. La perspectiva al 31 de enero de 2023 no permite esperar un retorno definitivo a la normalidad.
Informe hidrológico y tendencia de precipitaciones
Si bien es probable que los caudales se mantengan en la franja de oscilación de aguas medias durante el trimestre, el informe de INA cubre la evolución esperada de la situación hidrológica hasta el 31 de enero de 2023.
El INA señala que en la cuenca del río Paraná se esperan condiciones levemente deficitarias o normales.
Los resultados de diversos modelos de pronósticos del ENSO (modo natural de variabilidad del sistema climático acoplado océano-atmósfera que surge de las interacciones aire-mar en el Pacífico Tropical) señalan la evolución hacia condiciones de Niña para los próximos trimestres, con gran probabilidad durante noviembre-diciembre-enero y con probabilidades de mantenerse en dicha fase durante diciembre-enero-febrero.