Sin medidas de fuerza a la espera del fin de la restricciones
La Mesa de Enlace mantuvo ayer una reunión con la industria frigorífica de la carne vacuna y, tras dos horas de deliberación, las gremiales del campo descartaron llevar a cabo ceses de comercialización .
La Mesa de Enlace mantuvo ayer una reunión con la industria frigorífica de la carne vacuna y, tras dos horas de deliberación, las gremiales del campo descartaron llevar a cabo medidas de fuerza.
El encuentro fue en las instalaciones de la Sociedad Rural Argentina (SRA) y contó con la presencia de directivos de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Coninagro y Federación Agraria Argentina (FAA), que estuvieron acompañados por representantes de trabajadores del sector, industriales, consignatarios y autoridades del Mercado de Liniers. "Ni se habló de un paro", reconoció uno de los participantes tras retirarse de las instalaciones de La Rural.
Mediante un comunicado, los directivos rurales solicitaron al presidente Alberto Fernández "que revea la serie de medidas y decisiones administrativas tomadas y retrotraiga la normalización de los mercados a principios de abril". Las restricciones al cierre de las exportaciones de carne, vigentes desde el 20 de mayo, alcanzan a las vacas con destino a China y a un listado de siete cortes parrilleros de esa categoría.
La medida tiene como fecha de finalización el 31 de agosto y por el momento no hay señales sobre cuál será el rumbo que tomará el Gobierno. "Si hay una prórroga, sería una chispa muy importante para motivar reclamos más fuertes", admitió el vicepresidente de CRA, Gabriel De Raedemaeker, ante una consulta realizada por BAE Negocios. El directivo remarcó que "toda la cadena de la carne estuvo de acuerdo con el análisis del efecto del cierre de exportaciones elaborado por la Mesa de Enlace".
Este punto no es menor, en un escenario que muestra dos situaciones bien diferenciadas.
Tal como reconocen desde las gremiales rurales, las bases piden acciones más concretas, como el cese de la comercialización de hacienda. Las entidades deben hacer equilibrio entre el pedido de los productores y los tiempos políticos. Y, si bien no descartan lanzar medidas de fuerza, entienden que no es el momento adecuado. Un paro de estas características representaría un dolor de cabeza para los frigoríficos exportadores, que ven afectada su operatoria comercial.
En los últimos días, y con el objetivo de descomprimir la tensión entre el campo y el oficialismo, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, anunció la reapertura de un cupo de 3.500 toneladas mensuales de la cuota kosher. Y presentó los lineamientos del Plan Ganadero ante el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA). Al conocerse la noticia, los ruralistas advirtieron que la medida "no es suficiente".
Por Andres Lobato