EEUU

Preocupa la sequía y lo demuestra Chicago

Cada semana que pasa la situación climática en los Estados Unidos se va tornando cada vez más comprometida y lo demuestran los precios en Chicago.

23 Jun 2012

A comienzos de esta semana, el Mapa de Monitor de Sequía mostraba que casi el 90% del cinturón maicero estaba sufriendo sequía, de moderada a severa. Con el agravante de que esta semana buena parte del Medio Oeste comenzó a colorearse de rojo, lo que indica un grado de sequía extrema.

Los cultivos de verano, tanto soja como maíz, se están viendo afectados por este patrón climático de sequía, lo que se refleja en la sostenida recuperación de los precios en Chicago desde comienzos del presente mes. Esto, luego de las bajas generadas en mayo por la espectacular liquidación de posiciones, como respuesta del mercado al informe del USDA que proyectó un volumen de producción de maíz de 375,68 millones de toneladas y 87,23 millones para la cosecha de soja.

Ahora el mercado toma nota de la gravedad de la sequía y comienza un nuevo "rally alcista" que solo podrá cortarse con precipitaciones generosas por cantidad y cobertura. Esta será la tónica del mercado para las próximas semanas, serrucho alcista con picos de baja ante pronósticos u ocurrencia real de lluvias.

Los pronósticos de contenido de humedad del suelo para fines de septiembre en el Medio Oeste consideran una recuperación en un 40% de la superficie, el resto, con distintas dosis de humedad por debajo de lo normal. Mientras tanto, los cultivos todavía tienen que atravesar uno de los periodos más críticos: floración, polinización y llenado de grano, todo concentrado entre el 25 del actual y el 30 del mes próximo. Una ventana de "alto riesgo y alto voltaje" para el mercado, que ya comienza a olfatear el desenlace.

Mercado local

Mientras tanto, en la Argentina el mercado sigue dominado por el otorgamiento de ROE Verdes, cuya canilla es controlada por el Secretario de Comercio, Guillermo Moreno, de acuerdo con las necesidades de caja del Gobierno.

Esta semana se conoció la apertura de registros por 6 millones de toneladas para el trigo de la cosecha 2012/2013, recién en etapa de siembra. Este anuncio que puede ser tomado como un gesto o señal del Gobierno para que los productores siembren más trigo y tengan certidumbre hacia el futuro, no es tal. Se trata simplemente de necesidad de caja del Gobierno y para ello están vendiendo el trigo nuevo en forma anticipada, pago ya.

El próximo paso será la liberación de ROE Verdes de maíz de la cosecha actual. De acuerdo con la estimación oficial, la producción de maíz sería superior a los 20 millones de toneladas. Si consideramos que a la fecha el Gobierno ha otorgado permisos por 4 millones de toneladas, quedaría todavía un saldo exportable por vender de 6 millones de toneladas. Se trata de un ingreso fresco de US$ 1400 millones y de US$ 283 millones en concepto de retenciones, nada despreciable teniendo en cuenta lo seco que viene el río.

Como siempre ha sido, es nuevamente el sector agropecuario quien termina por ayudar al Gobierno en los momentos más difíciles. Lástima que el propio Gobierno no lo reconozca así. Uno de los sectores más dinámicos de nuestra economía, que podría aportar el año que viene un ingreso de divisas superior a los US$ 35.000 millones a partir de una cosecha probable de 105 millones de toneladas si el clima ayuda, le permitirá al Gobierno recaudar más de US$ 10.000 millones. Pero para que ello suceda el Gobierno debe considerar estratégico al sector agropecuario para el desarrollo y el porvenir de la Argentina, hecho que por el momento no ha sucedido.

Para que podamos aspirar a una cosecha súper-record en 2013, todavía se esta a tiempo, el Gobierno debería permitir las importaciones de todo tipo de insumos para el agro, para poder mejorar y aumentar la competitividad, amenazada por el atraso del dólar y bendecida por la inesperada suba de los precios internacionales. Si en definitiva por cada dólar que se importa de insumo agropecuario el Gobierno gana 3 más por tonelada exportada, una ganancia de US$ 2 exportados por cada 1 de importación. Nos preguntamos porque a veces es tan difícil entender la matemática básica, sin necesidad de recurrir a una calculadora científica.