Economia

La debilidad de la demanda es el principal problema de la lechería

De abril a mayo, el "sistema inmunológico" de la industria lechera trabajó mucho para enfrentar los efectos de la pandemia sobre sus ventas.

Condiciones Agroclimáticas 

Con perfiles bien cargados de humedad, y la capa superficial "ajustada" en la mayor parte de los suelos de nuestra Cuenca, dejamos mayo en buenas condiciones. Un mes que entregó pocas lluvias, pero condiciones apropiadas para el desarrollo de la base forrajera y las siembras. 

Se estima ahora que junio se comportará en forma similar, y que entraremos en un invierno moderado. 

Para el trimestre MAY-JUN-JUL, el SMN ratifica para nuestra región el pronóstico formulado en abril, de lluvias inferiores a las normales, con temperaturas normales para la época.

Producción y perspectivas 

Persistieron en mayo las buenas condiciones de producción en la Cuenca Oeste. Una base forrajera que está funcionando bien, reservas que resultaron mejor de lo esperado, buena relación de precios con los concentrados, y un buen estado corporal de los animales, así lo acreditan. Circunstancias que compartimos con otras cuencas lecheras, ya que a nivel nacional hemos cerrado el primer cuatrimestre con un incremento de 8% sobre el de 2019 (que fue un mal cuatrimestre), en litros/día.

El escenario comercial 

Abril: El precio repitió marzo en $/litro y bajó en $/KSU

Los precios de la leche en abril y para la Cuenca Oeste, se mantuvieron estables expresados en $/litro, y mostraron una pequeña baja en términos de $/KSU. Esto fue así porque al crecer el % de sólidos, y hacerse los acuerdos comerciales en $/litro, a igual $/litro, menor precio por Kg de SU. El precio se ubicó entonces (en promedio) apenas arriba de los $17,85/litro y en $248,00/KSU. Sobre el mes previo creció 0,17% en $/litro y retrocedió -1,22% en $/KSU. Expresados en dólares, los valores llegaron a u$s 0,27/litro, y los u$s 3,72/KSU. ($66,66/u$s Márgenes Agropecuarios). Y en la comparación interanual, los incrementos resultaron del 33,7% en "$/litro" y en "$/KSU".

Mayo: El precio en una meseta que lo va relegando

De abril a mayo, el "sistema inmunológico" de la industria lechera trabajó mucho para enfrentar los efectos de la pandemia sobre sus ventas. Lo hizo incrementando la elaboración de productos "básicos", que son los más demandados (leche fluida, queso cremoso, dulce de leche). Priorizó el volumen sobre el margen, logró vender bien y evitó formar stocks. El Tambo, aportó además su cuota de sacrificio, y el productor volvió a ver relegado su precio respecto de inflación y dólar.

El contexto de cadena

Desafío: pasar juntos y bien al 2021

La debilidad de la demanda interna y externa (consecuencia de la pandemia), se constituyó en nuestro principal problema del 2020. La lechería viene sorteando con esfuerzo, pero de pie, el 1er semestre, pero proyecta para el 2do un desborde del mercado local y dificultades para exportar, que pueden causar un derrumbe de precios y crisis graves a muchos tambos e industrias.

Tanto a nivel de empresa como de sector, se evalúan hoy distintas estrategias a seguir. Y es bueno que se contemple que esta situación es temporaria y va a pasar, que este no es un negocio evaluable como tal en el corto plazo, y que las medidas que se tomen hoy, no deben complicarnos mañana.

Ya se vio en 2018-2019 lo que pasa cuando los tambos son empujados a hacer una caja que les falta y empiezan a vender vacas: luego se cae la producción, lleva tiempo recuperarla, y otra vez volvemos a inconvenientes serruchos de precio. Quizá convenga intentar acciones coherentes, y previsibles, entre productores e industriales.

Objetivo: Enfocarse en potenciar el consumo interno y exportar todo lo que sea posible. Es el desafío para poder entrar juntos y bien al 2021.

Fuente : extractado por el OCLA del newsletter de CAPROLECOBA