AGRICULTURA

Se confirmó la resistencia de la mancha amarilla a estrobirulinas

Un trabajo presentado por el experto Marcelo Carmona, de la Facultad de Agronomía, afirma el primer hallazgo de América Latina.

 La falta de rotación de ingredientes activos para los tratamientos sanitarios es un serio problema para el manejo de la sanidad de los cultivos. Lo viene siendo para las malezas y, ahora, se agrega para los fungicidas. Así lo confirma un trabajo presentado por Marcelo Carmona, reconocido investigador de la Facultad de Agronomía (UBA) que anuncia el primer reporte, en América del Sur, que confirma la presencia de la mutación "G143A" en el gen "cytb" de poblaciones de Drechslera tritici-repentis (mancha amarilla), que otorga una fuerte resistencia a las estrobilurinas en general.

De acuerdo al informe, en varias localidades bonaerenses, la aparición de manchas foliares aún después de 1-2 aplicaciones de fungicidas, fue un denominador común. Como resultados de los aislamientos, se obtuvieron 91 aislados de los siguientes sitios de la provincia de Buenos Aires: Chacabuco, Chivilcoy, San Pedro, Pergamino, Azul, La Colina (Gral La Madrid) Mar del Sud (Gral Alvarado), y  General Madariaga.

Con el objeto de dilucidar la etiología de las manchas y la posible pérdida de sensibilidad de los patógenos involucrados a los fungicidas, se procedió a muestrear plantas representativas de cada lote objeto de sospecha. 

Confirmación de Resistencia

Para evaluar la sensibilidad a fungicidas, se realizó un ensayo exploratorio de modo de discriminar en forma rápida y como primer paso, entre cepas resistentes y sensibles. Los 91 aislados fueron sometidos a 100 ug/mL de cada molécula Qol (inhibidores de la quinona externa) más frecuentemente usada en Argentina (azoxistrobina, piraclostrobina y trifloxistrobina; 98% degrado técnico), para cuantificar la inhibición del crecimiento micelial. 

Entonces, la mayoría (90%) de los aislados creció a 100 ug/mL, observándose gran variabilidad entre cepas y moléculas Qol. Es de destacar que la dosis de 100 ug/mL es una dosis extremadamente alta que permite separar rápidamente las cepas resistentes de las sensibles.

Para determinar la presencia o no de mutaciones asociadas a la resistencia a estrobilurinas se secuenció el gen cytb en los 91 aislados bajo estudio.

El estudio molecular demostró que todos los aislados fueron portadores de la mutación G143A, que otorga una fuerte resistencia a las estrobilurinas.