Soja

Lo mejor está por venir

Las lluvias registradas en los últimos días frenaron la trilla en los núcleos productivos. Recién se cosecho el 9% de la superficie nacional y los mejores lotes están al caer

Abundantes lluvias que cubrieron extensas áreas provocaron una abrupta interrupción sobre el avance de las cosechadoras en sectores del centro y sur de nuestra región agrícola. Al presente informe el avance nacional de cosecha logró cubrir un 9,1 % de la superficie potencialmente recolectable, entregando un rinde medio nacional de 30,4 qq/Ha y permitiendo acumular un volumen parcial de 5,4 millones de toneladas. El avance intersemanal de cosecha es de 4,1 %, pero la recolección presenta un retraso de -4 % en comparación a igual fecha del ciclo previo.

Sobre el Núcleo Norte el rendimiento promedio a la fecha, luego de haberse recolectado un 25 % de la superficie disponible, es de 36,2 qq/Ha en lotes de primera. Su vecina región Núcleo Sur registró un rinde medio de 34,5 qq/Ha pero el avance de la trilla se encuentra aún por debajo del 10% de la superficie apta. En conjunto, ambas regiones aportan más del 30 % de la superficie implantada a nivel nacional y los rindes promedio recolectados al presente informe, como así también sus expectativas de rinde para las próximas semanas, se mantienen muy por encima a las perspectivas iniciales y ello permite sostener nuestra proyección de cosecha final en 48.500.000 toneladas.

Hacia el sur de la región agrícola, se relevaron progresos aislados en las recolecciones sobre el oeste y centro de Buenos Aires y también sobre el norte de La Pampa. Los resultados obtenidos en algunos casos superan los rendimientos previstos y ello refuerza aún más nuestra actual proyección de producción. No obstante, luego de las abundantes precipitaciones relevadas durante el pasado fin de semana, habrá que esperar a que se recupere el piso en cuadros y en los caminos, a fin de retomar las labores de recolección en estas regiones.

Según nuestro informe climático, la perspectiva comenzará con el paso de un frente de Pampero que recorrerá el área agrícola, produciendo lluvias escasas y limpiando la atmósfera. Sólo el noroeste y el extremo norte del área agrícola observará lluvias significativas, mientras que la mayor parte de su extensión recibirá valores escasos.