Se viene una fina complicada
Todo parece indicar que a las continuas políticas que promueven el abandono de la siembra de trigo se suma el factor climático que termina de desalentar al productor para apostar a los cereales de invierno
Las precipitaciones serán escasas para las próximas semanas según el climatólogo Eduardo Sierra. El especialista destaca que la mayoría de las lluvias se presentarán hacia la región norte, en provincias como el Chaco y Corrientes mientras que en la región pampeana las lluvias serán escasas situación a la que se le suma el ingreso de aire polar para la segunda quincena de marzo que provocarán heladas tempranas en la zona sur de Buenos Aires y La Pampa a comienzos del otoño.
Si bien se proviene de una temporada muy contrastante con un invierno de inundaciones y un verano de déficits para lo que queda de la campaña 2012-2013 se espera un comportamiento sumamente errático a nivel de precipitaciones y temperaturas. Las lluvias serán escasas hacia el interior del área agrícola nacional e irregulares en la región oriental de la pampa húmeda, Entre Ríos, Santa Fe. Para la zona de Cuyo y el Oeste bonaerense la situación será algo peor con menor pluviometría.
A partir de esta situación la gran perjudicada será la campaña fina que observará precipitaciones tan escasas que comprometerán la siembra de trigo y cebada porque los perfiles estarán con muy bajas reservas hídricas, especialmente en el oeste bonaerense. Adicionalmente se espera que las lluvias se recompongan durante la primavera de manera de que la cosecha fina también se verá afectada en cuanto a la calidad del grano.
Un ciclo planetario
Haciendo referencia a la reciente conferencia de Durban donde se llevó a cabo el congreso mundial del cultivo de soja, Sierra explicó que “el planeta tuvo un óptimo climático durante las décadas de los 80´y 90´s lo que permitió que la agricultura se corra hacia zonas marginales”. Según el especialista la situación está volviendo a la “normalidad”, o sea que el factor climático vuelva a ser un gran factor de riesgo, y esto va a generar problemas en la oferta mundial de alimentos porque para aumentar la productividad es necesario que entren a producir nuevas tierras y en estas condiciones es complicado, por lo menos en planteos de secano.