Macri avanzó en las coincidencias con Tillerson sobre la agenda comercial
recibió en Olivos al secretario de Estado de Trump; la apertura de las exportaciones y la eventual aplicación de sanciones a Venezuela dominaron la reunión bilateral
El presidente Mauricio Macri recibió ayer en la quinta de Olivos al secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, con quien conversó sobre los temas comerciales de interés bilateral, las posibles salidas de la crisis institucional en Venezuela y la organización de la cumbre del G-20, que este año lidera la Argentina.
Aunque la recepción fue cálida y el encuentro, ameno, con lo que se ratifica la buena sintonía entre ambos países, no hubo definiciones fuertes ni anuncios concretos respecto de los temas conversados, según indicaron fuentes del Gobierno que siguieron de cerca la reunión.Tillerson y Macri hicieron hincapié en la profundización del vínculo comercial y demostraron el interés por avanzar en la posibilidad de que Washington permita el ingreso de productos industriales argentinos, frutas o carnes a EE.UU., al tiempo que el funcionario de Donald Trump insistió en la apertura local al ingreso de carne de cerdo.
Luego de transmitirle un saludo "afectuoso" por parte de Trump, según indicaron en la Cancillería, el Presidente y el secretario de Estado conversaron sobre la crisis en Venezuela, en un tono similar al que dominó el encuentro entre Tillerson y el canciller Jorge Faurie, anteayer.
En la reunión con Macri, Tillerson reiteró que EE.UU. sigue con atención la posibilidad de implementar sanciones contra Caracas a través del petróleo, aunque, según él, tienen presente que ese tipo de medidas podrían empeorar la situación humanitaria en ese país, que es grave.
La Argentina ya expresó su rechazo a la imposición de un tipo de sanciones que perjudiquen al pueblo venezolano, pese a que también podrían debilitar al régimen de Nicolás Maduro, que hace tiempo que dejó de respetar los lineamientos democráticos, según afirman con insistencia los funcionarios en sus apariciones públicas.
Sin embargo, el mal estado de las relaciones comerciales entre la Argentina y Venezuela vuelve un sinsentido que Buenos Aires evalúe imponer sanciones. Es por eso que será clave para el futuro de Caracas qué decisión tome EE.UU., con quien el vínculo por el petróleo es mucho más fuerte.Tillerson lleva la crisis en Venezuela como uno de los principales temas de su gira por América Latina. Aunque todavía no se confirmó que vayan a aplicarse sanciones -que también podrían tener un impacto en algunos sectores de la economía norteamericana-, el funcionario republicano reiteró en su paso por el país que no se puede seguir de brazos cruzados ante esa situación.
En tanto, durante el encuentro, que duró poco más de media hora, Macri y Tillerson también coincidieron en la necesidad de mantener el mejor vínculo posible con los países del Caribe por la importancia de mantener una sintonía en la región.
También se debatieron aspectos de la organización de la cumbre del G-20, que este año está a cargo de la Argentina, y se destacó el nivel de exposición que adquiere el continente americano este año, al llevarse a cabo también la cumbre del G-7 (en Canadá) y la Cumbre de las Américas (en Lima).Por su parte, poco antes de la partida de Tillerson de la Argentina se conoció que el funcionario acordó con la Cancillería aumentar la cooperación bilateral para combatir las actividades de lavado de dinero en América Latina destinadas a financiar células terroristas.
Liderazgo regionalLa reunión de ayer cerró la visita oficial de Tillerson por la Argentina, que comenzó el fin de semana pasado en Bariloche -luego de una primera escala en México- y que tuvo su día de mayor actividad anteayer al mediodía, cuando compartió una conferencia de prensa con el canciller Jorge Faurie en el Palacio San Martín.
Durante su estada en el país, el secretario de Estado de Trump elogió el liderazgo que Macri está adquiriendo a nivel regional y destacó que el Presidente se haya convertido en un "paladín" de los principios de la democracia.
Tillerson abandonó ayer la Argentina hacia sus próximos destinos en la gira regional. El secretario de Estado visitará Perú, donde se reunirá con el presidente Pedro Pablo Kuczynski, a quien también planea llevarle el planteo por Venezuela. Según dijo Tillerson días atrás, será el mandatario peruano el que deba definir si Caracas participará de la Cumbre de las Américas en abril. Allí, Tillerson también tratará la posible visita de Trump a Lima para ese encuentro multilateral. La Casa Blanca aún no confirmó su participación.
Hacia el fin de la semana, Tillerson emprenderá camino a Colombia y Jamaica, donde finalizará su gira.
Alan Soria Guadalupe