Controles

Una "súper" maleza resiste más de 25 aplicaciones de glifosato

En Malasia hay un biotipo de "pata de gallina" que, como mínimo, es capaz de resistir esa increíble cantidad de aplicaciones de ese herbicida sin sufrir alteraciones.

2 Oct 2017

La Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (Fauba) difundió el increíble caso de una maleza que es capaz de resistir hasta más de 25 aplicaciones de glifosato.

En concreto, se trata de un estudio publicado en la revista científica Plant, Cell & Environment que detectó, en Malasia, un biotipo de Eleusine indica o "pata de gallina" que, aun cuando se le arroje este herbicida en la cantidad mencionada y en las dosis recomendadas, no sufre alteraciones.

¿Por qué sucede esto? Por la misma razón que han explotado las malezas resistentes en Argentina: el uso continuado por décadas y en altas dosis de este agroquímico, que derivó en una segunda mutación en el gen que le brinda a esta maleza resistencia al glifosato.

Y las malas prácticas de los productores son claves: la doble alteración genética tiene una probabilidad muy baja de aparecer en forma natural: una en un billón.

El caso

"Eleusine indica se encuentra en muchos agroecosistemas de todo el mundo, pero es la primera vez que aparecen dos variantes en un gen de esta maleza. A diferencia de las plantas que poseen una única mutación, las plantas con dos mutaciones no sufren ningún estrés al aplicarles el herbicida. Es como regarlas con agua", resaltó Martín Vila Aiub, docente de la Cátedra de Ecología de la Facultad de Agronomía de la UBA (Fauba) e investigador independiente del Conicet.

Vila Aiub, quien realizó los experimentos en la University of Western Australia en conjunto con la Fauba/Conicet y el Australian Herbicide Resistance Initiative (AHRI), explicó: "Si la dosis recomendada de glifosato es de un kilo por hectárea, estos mutantes naturales pueden seguir creciendo y reproduciéndose aun cuando son expuestos a 25 kilos de glifosato por hectárea. En los ensayos para medir resistencia usamos esa dosis como máxima, pero tranquilamente podríamos haber seguido observando lo mismo con 30 ó 50 kilos por hectárea".

Malas prácticas

Como se mencionó, la aparición de esta doble alteración genética se encuentra relacionada con las décadas de aplicación de glifosato en dosis crecientes.

Vila Aiub afirmó que el uso continuo del herbicida aumenta las probabilidades de estos eventos: "Un mutante resistente aparece en una frecuencia muy baja, pero como tras la aplicación mueren todas las plantas sin resistencia, en poco tiempo, los lotes terminan llenándose de plantas resistentes".

Sin embargo, el investigador reveló la forma de combatir la multiplicación de esta elevada resistencia en los mutantes dobles: "Esta resistencia es muy costosa para la planta. Es decir, crece a tasas muy bajas y produce pocas semillas porque destina a la resistencia los recursos que podría usar para crecer. Por ello es la clara ganadora si se aplica el herbicida. Lo único que la mantiene en el sistema agrícola es el uso del glifosato. Dar un descanso en el uso de este herbicida reduce de forma drástica en los lotes la frecuencia de esta doble mutación".

En cuanto a la situación local, advirtió que la especie se encuentra en la Argentina, incluso con resistencia reportada al glifosato, y que aún no saben si tiene la doble mutación, pero que, sencillamente, puede aparecer si continúa la alta dependencia en el uso de este herbicida como única herramienta de control químico de las malezas.