Cuidar lo que está sano
Un criterioso manejo poscosecha de granos afectados con Fusarium puede reportar beneficios económicos en la comercialización
Durante la presente cosecha de cereales de invierno se ha observado una importante incidencia de Fusarium sp, el hongo causante de la fusariosis de la espiga, en ciertas regiones del país. Esto se debe a que los estados de espigazón, floración e inicios de llenado del grano han coincido con períodos muy húmedos y templado-cálidos que favorecen el desarrollo de Fusarium sp. Los cultivos afectados por este hongo tienen problemas de calidad comercial e industrial, además de presentar riesgos de desarrollo de micotoxinas, está probado.
Las micotoxinas son compuestos químicos producidos por algunos hongos y afectan granos y forrajes. Su ingestión, inhalación o absorción cutánea reduce la actividad, hace enfermar o causa la muerte de animales y personas. Las especies de fusarium son clásicas generadores de estas toxinas consideradas inmunodepresores y su consumo genera rechazo del alimento, pérdida de peso, vómitos, diarrea, anemia y lesiones cutáneas.
Acopio de granos afectados
Es realmente importante revisar los lotes de grano de trigo para determinar el nivel de incidencia y severidad (si hay fusariosis y cuánto hay) de la enfermedad de cada uno de ellos. Generalmente diferentes lotes suelen tener diferentes niveles de afectación y no es conveniente mezclar granos afectados con granos sanos. Esto implica, tal vez, un trabajo extra en la logística pero claramente generará beneficios en la comercialización.
De no contarse con información previa de los lotes de producción, se deberá realizar un exhaustivo muestreo de los granos a la entrada del acopio.
Los granos afectados con Fusarium sp. son más livianos que los granos sanos, por lo que lo más práctico es utilizar esta diferencia de peso para facilitar la limpieza. Una de las maneras más efectivas de separación es a través de una corriente de aire que, por medio de una corriente de aire forzada "vuele” el grano afectado y deje caer el grano sano, más pesado. Cuando el grano está ligeramente húmedo hay mayor diferencia de peso entre el grano sano y el grano afectado.
Secado y Almacenaje
El acopio de granos en chacra, en silobolsa, es una práctica muy difundida y perfectamente apta también para estos casos. Pero aquí más que nunca se debe cuidar mucho el porcentaje de humedad de los granos. Con 14 % de humedad o menos, los hongos no se desarrollan por lo que podemos acopiar trigo con fusarium sin riesgos, pero por encima de este valor, y cuanto más alto peor, las esporas del hongo estarán activas y desarrollaran la enfermedad afectando aún más la calidad del grano. Así, será preciso hacer un secado de granos si la cosecha se realizó con valores por encima del 14 %. En condiciones normales, sabemos, es posible embolsar con un par de puntos más y un buen monitoreo posterior además de plazos más cortos; pero con fusarium es requisito mandatorio embolsar con menos de 14 %.
Es casi seguro que los lotes de este cereal afectados por Fusarium hayan producido ya las toxinas por lo que se deberá asegurar un control posterior.
La separación de granos antes mencionada nos permitirá separa los acopios ya sea en planta de silos o en diferentes bolsas dentro del campo, se menciona más arriba las dificultades que esto puede generar a la logística, es probable que se requieran dos equipos de embolsado simultáneos. Pero es seguro que separar granos afectados con micotoxinas y granos limpios dará un beneficio económico durante la comercialización ya que no toda la cosecha será castigada.
Extractado de Manejo de Trigo con Fusariosis en la Poscosecha de Ricardo Bartosik1, Claudia Castellari2, Leandro Cardoso1, Diego de la Torre1, Bernadette Abadía1, Bárbara Carpaneto1 y Facundo Marcos Valle2
1Unidad Integrada Balcarce, INTA, proyecto INTA-PRECOP: Eficiencia de Cosecha y Poscosecha.
2Unidad Integrada Balcarce, FCA-UNMdP, Cátedra de Microbiología.