Ratifican bloqueo al asado pampeano
Para el Senasa los riesgos de aftosa por ingresar carne con hueso a la Patagonia no son altos, pero se debe mantenerse el estatus.
La guerra del asado suma cada vez más frentes de batalla y mientras el gobierno de La Pampa golpea para pasar la barrera fitosanitaria, desde Senasa explicaron que el riesgo de hacerlo existe y que no se puede permitir.
El director nacional de Sanidad Animal de Senasa, Ricardo Maresca, en diálogo con "Río Negro", explicó que son categóricos en la negativa de ingresar carne con hueso a la zona de Patagonia -en la que no se vacuna- para mantener el país sin peligros.
"Hay riesgo de introducir, en el hueso del asado, el virus de la fiebre aftosa. Está demostrado que cuando el animal muere, en la carne el grado de acidez aumenta y hace inviable al virus, cosa que no sucede con el hueso, en donde sigue activo".
La Pampa, en las campañas que viene realizando, pone como argumento que en el hueso plano no se transmite la aftosa, cosa que el director de sanidad desacreditó.
"No hay distinción, el hueso no se define por plano, con médula o sin médula. No tiene nada que ver. Pasa que en el código de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) hablan de huesos largos y puede haber confusión, pero en el hueso el virus permanece viable", dijo Maresca.
Desde Senasa se hizo un estudio, y asumen que el nivel de riesgo no es alto, pero a pesar de esto, en el dictamen técnico que elaboraron advierten que aunque sea bajo el peligro la decisión que se debe tomar es que en Patagonia no entre carne con hueso.
Según el director de sanidad, hasta tanto no se deje de vacunar en el resto del país y las autoridades determinen que el nivel de riesgo desaparece, no se va a permitir entrar con hueso al sur. "La infección por el virus, en los animales vacunados, puede mantenerse solapada, estar latente", explicó Maresca.
Los países extranjeros que compran carne en la Patagonia argentina, no reconocen a las zonas libres con vacunación. "Sobre todo Estados Unidos y la Unión Europea, nos podrían cuestionar y podría afectar la importación de productos desde la Patagonia", dijo.
La zona ya fue reconocida por la OIE como libre de aftosa, pero faltan algunas inspecciones de Estados Unidos, Chile, la Unión Europea para que corroboren el estatus sanitario que logró el sur.
En cuanto a los ingresos por contrabando el director fue categórico en decir que hay que respetar los requisitos . En este sentido, explicó, los que hacen trampas para pasar y vender carne en Patagonia de manera ilegal, podrían perjudicar la exportación en todo el país.
"La Patagonia no tiene un impacto muy grande en el comercio internacional pero si ocurre un brote, por pequeño que sea, se caerían de inmediato todos los mercados del mundo. En Brasil, por un solo caso se cayeron todos los mercados y no pudieron importar por un tiempo. Para algunas enfermedades el impacto comercial es altísimo y hay que protegerse", concluyó.