Recontracampeones
El festejo loco de todo el plantel con la Copa del campeonato. Lanús fue lejos el mejor del torneo y lo demostró goleando 4 a 0 a San Lorenzo
Lanús no dejó dudas de que fue el mejor equipo del Torneo de Transición. Si quedaba alguna la despejó con una goleada ante San Lorenzo, el ganador de la otra zona.
Un 4 a 0 que refleja la diferencia que hubo entre uno y otro equipo en la cancha y que pudo haber sido más abultado.
Lanús arrancó el partido haciendo pesar la velocidad de sus delanteros y la calidad del paraguayo Miguel Almirón, que fue la gran figura de la cancha. San Lorenzo no encontraba la pelota y no hacía pie en una mitad de la cancha, que extrañó mucho la categoría de Néstor Ortigoza, pero cuando se pierde los que faltan son siempre los mejores.
Lanús, con Iván Marcone y Román Martínez, se adueñó de la pelota y partían los "latigazos" para las corridas de Lautaro Acosta y "Junior" Benítez. Sin embargo, el gol llegó por un centro por izquierda de Maxi Velázquez, que cabeceó Oscar "Junior" Benítez, ganándole a Angeleri.
Lanús generó en los primeros 30 minutos diez situaciones claras de gol, pero no tuvo puntería. Después, San Lorenzo emparejó el juego gracias a que Lanús aflojó y eso le permitió a Belluschi y Mussís manejar la pelota y generar dos situaciones de gol.
En el segundo tiempo, Lanús retomó el dominio y no lo cedió más. Miguel Almirón consiguió el segundo con un remate esquinado que dejó sin chance a Torrico.
Pablo Guede intentó cambiar la historia con el ingreso primero de Pablo Barrientos por Franco Mussis, y después de Martín Cauteruccio por Emmanuel Más, pero lo único que logró es dejar más espacios para el contraataque de Lanús, que aprovechó la salida de Más para desbordar por derecha y mandar el centro que terminó con el gol del "Pepe" Sand, que estaba en posición adelantada.
El tercer gol terminó de derrumbar a San Lorenzo, que tozudamente buscó descontar, tratando de achicar la diferencia, pero en lugar de eso consiguió que Lanús le pegue la cuarta cachetada, esta vez con Lautaro Acosta de contraataque. Para Lanús fue "bailando por un sueño", para San Lorenzo, un suplicio de 90 minutos que no cambia el buen campeonato que hizo, pero que lo tendrá que hacer reflexionar sobre el equilibrio del equipo. Lanús ganó su segundo campeonato en la historia y no dejó ninguna duda.