Expoagro 2016

La feria muestra que se renuevan las expectativas del campo

Las opiniones de los productores, la presencia de las empresas, el nuevo interés de la demanda. Una recorrida por lo que pasa en la megamuestra

9 Mar 2016

“Ahora sí dan ganas de sembrar. Es evidente que las medidas del gobierno han cambiado para bien el ánimo de la gente de campo”, evalúan Mario y Ricardo, dos experimentados contratistas de Lincoln que visitaron ayer, en su debut, la Expoagro 2016. En la gran muestra agropecuaria a cielo abierto se respiran aires muy diferentes a los del año pasado. Y todos -funcionarios, dirigentes y productores de a pie- vaticinan un salto de las siembras a partir de la próxima campaña, que podría aportar una cosecha de unas 125 millones de toneladas en 2017.

Los contratistas son la mano de obra de la nueva agricultura pampeana, quienes manejan los enormes equipos que trabajan sobre los campos. En el caso de estos dos amigos, expertos en el arte de la cosecha, ligan de rebote los beneficios de la devaluación y la quita de retenciones en los números del productor y su retribución mejoraría de unos 600 a 1.000 pesos por hectárea. No se van a volver millonarios ni nada por el estilo, pero vinieron a la Expoagro y miran los fierros con renovados bríos. “Todavía no alcanza para cambiar la cosechadora, pero te da más ánimo”.

En la 10° edición de la exposición agropecuaria más grande del país se repiten las postales que dan cuenta de las nuevas expectativas del agro. Por un lado, hay un regreso de varias empresas que ofrecen servicios y productos al chacarero. Y éstos vuelven a asomar la cabeza, después de varios años en los que sus balances fueron negativos. “Se sembró con un dólar de 9 pesos y hoy tenemos uno de 15. Hay que ver que sucede con los costos para la próxima siembra, pero es innegable que tenemos otra expectativa”, dicen Gastón y Fernando, dos agrónomos que llegaron desde Olavarría.

Postal uno. Hay conferencia de las entidades que cuidan los intereses de los principales cuatro cultivos: soja (Asoja), Maíz (Maizar), trigo (Argentrigo) y girasol (Asagir). Hay lleno total mientras los dirigentes agradecen las medidas tomadas por la gestión Macri y prometen una reactivación de las siembras a partir del ciclo 2016/17, porque a esta campaña los anuncios llegaron tarde. El primero en el calendario es el trigo y Davis Hughes, de esa cadena, suspira de alivio: “El actual gobierno nos ha sacado el pie de encima”, dice.

Postal dos. Ni bien se ingresa a la Expoagro, se aparece de frente a los visitantes el stand del Ministerio de Agroindustria, el gran ausente de esta muestra en tiempos del kirchnerismo. El ministro Ricardo Buryaile pasa todo el día en el predio y recibe palmadas de apoyo de lo productores en vez de insultos. El funcionario reconoce que subsisten muchos problemas pero evalúa que los efectos de las nuevas medidas van a comenzar a notarse pronto. Primero con el trigo, donde la producción podría crecer de 11 a 16 millones de toneladas. “Este gobierno asumió un jueves y el lunes eliminó las retenciones ¿Por qué? Porque entiende que es un sector social, un sector productivo, es federalismo y desarrollo territorial. Y porque el productor es un tipo macanudo y cuando lo tratan bien”, responde.

Postal tres. En el pabellón del Banco Galicia hay un cóctel multitudinario, como no se veía desde las mejores épocas. Hay cupos de admisión porque no cabe más gente. Gustavo López, de la consultora Agritrend, adelanta a Clarín sus pronósticos para la cosecha que llegará en 2017 con mejorías sensibles para el trigo, el maíz y el girasol, los cultivos que ya no pagan retenciones. Para la soja, que sigue pagando 30%, espera una caída, pero muy leve. En total prevé el ingreso de 123 millones de toneladas, contra 108 millones del ciclo actual. Subirían un 10%.

Postal cuatro. Los ruralistas más duros han bajado el tono crítico que tuvieron los últimos ocho o nueve años para con las autoridades. Luis Miguel Etchevehere, el presidente de la Sociedad Rural, coincide en que “esta cosecha es la que se sembró con el gobierno anterior, pero hay muchas expectativas para la siembra que viene. El potencial del campo es enorme”. Los jóvenes de las entidades de la Mesa de Enlace, por su lado, se reunieron en el predio para debatir sobre los desafíos de la nueva dirigencia en el futuro.

Postal cinco. El ex presidente del Banco Provincia, el sciolista Gustavo Marangoni, visita la exposición por invitación del titular actual del Banco Nación, Carlos Melconián. En su recorrida tropieza con el pabellón del stand del banco que condujo hasta a diciembre y preguntó por su sucesor, Juan Curuchet. No solo hablaron amigablemente sino que hasta le dejó un elogio: “Este stand está mucho más atractivo que antes”. Como el campo y su gente, que en poco tiempo renovaron el aire.