La carne se encarece por la intermediación e impuestos

El valor de la hacienda en Liniers representa la mitad del precio final que paga el consumidor en carnicerías y supermercados, mientras que el otro 50 por ciento, se reparte entre la incidencia que tiene la faena en los frigoríficos, el transporte, el comercio y los impuestos.

El dato es aportado por un informe del Ieral, el instituto de investigaciones de la Fundación Mediterránea, con la firma de los economistas Juan Manuel Garzón y Nicolás Torre, realizado en base a datos aportados por valores de referencia relevados en Liniers y en los niveles de precios presentados al consumidor reseñados por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (IPCVA).

Según los técnicos del Ieral, el precio de “la hacienda representó el 50 por ciento del valor de la carne en enero de 2016 y esta participación se ubica tres puntos porcentuales por debajo de la media observada durante los últimos ocho años”.

Aumento del costo

El informe explicó además que “el otro 50 por ciento” está conformado por “la participación conjunta” que ofrecen “los servicios de faena (de los frigo­ríficos), el transporte, la comercialización (en súper y carni­cerías) y la del Estado, en tres niveles, a partir de los impuestos que aplicó sobre estas ac­tividades”.

Durante el período de “gran liquidación” de vacas registrado entre 2008 y 2009, como respuesta a la política adoptada por Guillermo Moreno, el Ieral reconoce que “la incidencia de la hacienda estuvo en sus mínimos, por debajo del 45 por ciento durante muchos meses”.

Aunque los técnicos medi­terráneos mencionan que “la incidencia (del valor pagado en Liniers) estuvo por encima del 60 por ciento durante varios ­meses de los años 2010 y 2011, en plena fase de retención de vientres y escasez de animales para faena”.

Respecto al negocio que ofrece la faena, el volumen de carne está representado por un 57 por ciento del kilo/vivo que presenta el animal, y allí un bovino de unos 400 kilos en pie podría reportar el aprovechamiento de unos 228 kilos de carne para su consumo.

En las carnicerías, a partir de los cortes que se disponen en la media res, la pérdida física de carne apenas supera el 3 por ciento, mientras que otro 17,6 por ciento corresponde a hueso, grasa y recortes, productos de poco valor comercial.

Más allá de la dificultad que el Ieral refiere respecto a la ­imposibilidad de realizar un análisis de la rentabilidad que ­ofrece cada eslabón del sector, se percibe que en enero el valor de la hacienda en Liniers representa el 50 por ciento del valor de la carne vacuna en las góndolas, cuando el promedio desde 2008 fue del 53 por ciento.

En enero de 2015, dicho porcentaje fue del 51 por ciento, hecho que según los especialistas mediterráneos, en la relación anualizada da cuenta de una variación del 46,7 por ciento en el precio de la hacienda y del 50,3 por ciento para el precio de la carne abonado en los mostradores y supermercados.

Alza de la canasta

En tanto, la Canasta Alimen­taria Nutricional de la ciudad de Córdoba que elabora el Consejo Profesional de Ciencias Económicas subió en enero pasado 7,12 por ciento en relación al mes anterior. Con ese comportamiento, concluye que la variación interanual fue de 40,63 por ciento.

La entidad profesional con­sidera que para una familia de cuatro miembros (compuesta por un matrimonio y dos hijos menores) el valor de la canasta es de 8.380,89 pesos.

En el registro del interior de la provincia, en Villa María la suba en enero fue de 3,35 por ciento en relación al mes anterior y el acumulado anual alcanza el 28,22 por ciento.

En Jesús María, el aumento fue del 6,54 por ciento en relación a diciembre y el interanual alcanza 33,85 por ciento.

Para la ciudad de Marcos Juárez el incremento fue de 4,43 por ciento en relación con di­ciembre y en un año suma 39,40 por ciento.

A su vez, en la ciudad de Río Cuarto la canasta alcanzó un aumento de 5,76 por ciento en relación al mes anterior y un acumulado de 38,79 por ciento.

Por último, el informe señala que en la ciudad de San Francisco, la Canasta Alimentaria Nutricional registró un aumento de 7,74 por ciento respecto a diciembre y un acumulado interanual de 34,12 por ciento.

Canasta alimentaria

Informe. El Consejo de Ciencias Económicas que preside José ­Simonella (foto), precisó que en enero la Canasta Alimentaria Nutricional (CAN) para un adulto fue de $ 2.712,26.

Esto representa una suba de 7,12 por ciento en relación con el mes ­anterior. La variación interanual respecto a enero de 2015, fue de 40,63%. Para una familia de cuatro miembros el valor de la CAN es de 8.380,89 pesos.