Más que tres puntos
Biglia convirtió el gol y se va a abrazar con el “Pocho” Lavezzi (arriba). Después llegó el pitazo final, el festejo y el desahogo. Argentina venció a Colombia en Barranquilla y consiguió el primer triunfo en las Eliminatorias (abajo)
Argentina tenía la obligación de ganar, para enderezar el rumbo en estas Eliminatorias y para despejar los fantasmas que merodeaban en cuanto a la continuidad del técnico Gerardo Martino. Y como en las Eliminatoria para el Mundial de Brasil, el encuentro ante Colombia, en Barranquilla, resultó el punto de inflexión para una Selección que apenas sumaba dos puntos (una derrota ante Ecuador como local y dos empates, ante Paraguay y Brasil).
El viernes, ante los brasileños había dado muestras de una recuperación futbolística y ayer la consolidó ante Colombia. Por eso, el triunfo vale más que tres puntos. Sirvió para recuperar el fútbol, la confianza y el espíritu ganador, a pesar de las ausencias importantes.
Para enfrentar a Colombia el equipo argentino cambió su idea y eso confundió al local. Con Lucas Biglia, la figura del partido junto a Éver Banega, se plantó en el mediocampo, se hizo dueño y le negó posibilidades de ataque al local, que no fue capaz de revertir la situación.
Higuaín había encendido la luz de alarma en el arco colombiano a los 12 minutos. Y 7 minutos después llegó el gol de Biglia, que nació de un quite del propio volante de Lazio al delantero Teófilo Gutiérrez, que generó el ataque de Banega, quien cedió a Lavezzi por derecha. El "Pocho" envió el centro que Zapata no pudo despejar (le pasó factura el mal estado del campo de juego) y Biglia, en soledad, sólo tuvo que empujarla de zurda.
El primer tiempo finalizó con Argentina firme en el medio campo y la marca en la defensa y hasta pudo definir el partido cuando Di María desperdició un mano a mano con el arquero David Ospina (40 minutos).
En el complemento, Argentina dejó de presionar tanto para cuidar energías y Colombia emparejó el trámite con el ingreso de Muriel. El equipo de Pekerman contó con la tenencia de la pelota pero no le generó situaciones de riesgo a la Argentina, que tuvo en Biglia, Mascherano y Banega un trío fundamental para cortar cualquier avance, más los despejes sólidos de Nicolás Otamendi y Funes Mori y el buen partido de Gabriel Mercado, que salió desvanecido (ver aparte).
Argentina pudo haber ganado por mayor amplitud, ya que le fue anulado mal un gol a Dybala por un inexistente offside y cuando el propio jugador delantero de Juventus estrelló un tiro en el poste.
Fue el primer éxito de Argentina en esta serie, que se traduce como un fuerte apoyo del plantel a Martino y representa una recuperación concreta del equipo para continuar en marzo su participación en estas Eliminatorias Sudamericanas en Santiago, ante Chile.