China: "Más de un hijo representa 50 millones más al 2030"
El Partido Comunista de China anunció la última semana su decisión de flexibilizar la autorización para que las familias de ese país puedan tener un segundo hijo, abandonando la política de “hijo único” implementada en 1979 para controlar la natalidad en el país más poblado del mundo.
Aunque no se conocen datos certeros sobre cómo esto podría impactar en la demanda mundial de alimentos, automáticamente la noticia disparó la cotización en bolsa de multinacionales vinculadas a la infancia, como la francesa Danone, la suiza Nestlé (alimentación) o la estadounidense Johnson & Johnson (cuidado y salud).
Para Horacio Busanello, CEO del Grupo Los Grobo y autor del libro “China: ¿Conquistador o socio estratégico?”, esta política del segundo hijo en China le permitirá crecer en 50 millones de habitantes para 2030, una cifra no tan significativa para ese país pero que le abre muchas oportunidades a la Argentina.
- ¿Qué perspectivas pueden abrirse para el sector agroindustrial argentino con esta decisión del Gobierno chino de permitir el segundo hijo?
- Con esta nueva política, se estima unos 50 millones de habitantes adicionales para el 2030. Simplificando podemos decir que, en primer lugar, la decisión implica agregar la población aproximada a la Argentina del 2030. Según datos del Credit Suisse, el cambio en la política significará un aumento en el número de bebés en el rango de tres a seis millones. Esto significa un gasto adicional entre 18.000 y 36.000 millones de dólares por año, poco más de 6.000 dólares por bebé y por año, dando un mayor impulso a la economía local. Pero junto con el aumento de la población, está surgiendo una demanda de alimentos –principalmente bebes y niños– con mayores estándares de calidad, más sofisticación y mayor control en lácteos, carnes, etc. Siendo que los chinos no confían en su industria local, entonces es una gran oportunidad para Argentina pero deberá competir con países como Australia o Nueva Zelanda que ya están presentes en el mercado.
- De existir un incremento en la demanda de alimentos y otros bienes, ¿en qué plazo se notaría de una manera que realmente pueda ser significativa?
- El aumento será gradual pero se potenciará llegando a 50 millones para el 2030. Una cifra pequeña para china pero una enorme oportunidad para nosotros. Pero para concretar negocios hay que implementar una política de largo plazo para no solo vender productos de distinto tipo sino también para crear marcas que atraigan al consumidor chino.
- ¿Este probable incremento en la demanda podría también tener impacto en los precios de las materias primas?
- No veo que 50 millones más de habitantes provoquen un desequilibrio dramático entre la oferta y demanda de alimentos mundial. Naciones Unidas pronostica que para el 2050 la población mundial crecerá otros 2.000 millones de personas. La mitad va a nacer en el África subsahariana, y otro 30 por ciento en Asia meridional y sudoriental. Para enfrentar este desafío la humanidad ha desarrollado un sofisticado y amplio paquete tecnológico que incluye mejores semillas, inoculantes, biotecnología, fertilizantes, defensivos agrícolas, más y mejores maquinarias e implementos agrícolas, tecnología informática para agricultura de precisión, creciente eficiencia en la producción de carnes así como un pipeline de productos y nuevas tecnologías que verán la luz en los próximos años y que permitirán producir más con menos y de manera sustentable. Estados Unidos, Brasil y Argentina están al frente en este tipo de tecnologías con la sola diferencia que Argentina ha reprimido su capacidad de producción en los últimos años. Esperamos que esto se revierta con el nuevo gobierno.
Consideraciones
Además de responder las preguntas, Busanello realizó algunas consideraciones que permiten dimensionar cómo podría impactar esta noticia ya que, si bien la lectura que se hizo a nivel mundial fue muy positiva, el CEO de Los Grobo destaca que ya se venía flexibilizando la posibilidad de tener un segundo hijo sin mayores resultados.
Un primer factor a tener en cuenta es que la implementación de esta medida correrá por parte de los gobiernos provinciales, regiones autónomas y municipalidades. “Es decir, que las autoridades locales tienen discrecionalidad en cuanto a cómo y cuándo la van a implementar. Por lo tanto, las parejas que quieran tener un segundo hijo deben esperar que se cambien las leyes locales; si no, estarán realizando un acto ilegal”, explicó Busanello.
Otro aspecto clave es que no necesariamente la población China demanda la posibilidad de tener un segundo hijo. “El relajamiento de la política de hijo único introducida en 2013 no significó un cambio masivo en la decisión de las parejas por una familia más numerosa. En ese momento el gobierno central decidió que las familias donde uno de los padres era hijo único podían registrarse y pedir autorización para tener un segundo hijo. Desde ese momento a la fecha solo 1,5 millones de parejas elegibles para un segundo hijo sobre un total estimado de 11 millones hizo uso de esa excepción. Es decir que solo un 14 por ciento de dichas parejas decidió tener otro hijo”, sintetizó Busanello. Esto es así porque las parejas priorizan su éxito profesional y económico a la decisión de tener hijos.
Ahora, el Gobierno chino estima que unas 90 millones de parejas son elegibles para aplicar a esta política. “Las autoridades harán un monitoreo de los pedidos de autorización para un segundo hijo durante los próximos años. Si los mismos son bajos y la política no tiene el éxito esperado entonces dispondrá seguramente una mayor flexibilización de la misma”, pronosticó Busanello.
La Voz del Interior