Dicen en el campo...

... que hasta el clima parece seguir los altibajos de la recalentada campaña política. Una corriente de frío que hizo nevar en nueve provincias, ola de calor en el norte y finalmente tormentas (con granizo incluido en algunos casos) en vastas zonas de la Pampa Húmeda fueron las características salientes. Entre las reuniones, el Coloquio de Idea en Mar del Plata, que reunió a más de un millar de los principales empresarios del país junto a diplomáticos de varios países y muchos candidatos de todos los niveles fue lo más convocante; mientras que el campo realizó, finalmente, su jornada de protesta y esclarecimiento en el Obelisco, llamativamente, con muy pocas presencias políticas: sólo el actual jefe de la Ciudad y candidato presidencial del PRO, Mauricio Macri (que fue muy temprano a las 7.15 hs), y bastante más tarde la candidata a gobernadora de Buenos Aires del mismo partido, María Eugenia Vidal, acompañada por el titular de UATRE, Gerónimo "Momo" Venegas (recién aterrizado de Centroamérica) y "Toti" Flores. Lamentablemente, Vidal fue "copada" por los periodistas y por eso parece no haber tenido tiempo de recorrer el "supermercado" armado por la gente del campo en plena Plaza de la República, donde se podían ver los precios que reciben los productores y sacar rápidamente la cuenta del encarecimiento que se registra a lo largo de la cadena comercial hasta llegar a los consumidores. El tema no es menor, más aún en Buenos Aires, una de las principales provincias productoras del país.

... que prácticamente las cúpulas completas de las tres entidades convocantes (Sociedad Rural, CRA y Coninagro) estuvieron presentes con productores y delegaciones de distintos lugares, incluyendo a agricultores chaqueños que vinieron a la Ciudad con tremendos fardos de algodón. De todos modos, la mayoría de lo expuesto eran alimentos (frutas y verduras), que no bien terminó el programa (a las 10) fueron cargados en un camión rumbo a Los Piletones de Margarita Barrientos. Naturalmente, las quejas de los productores parecían inagotables, y tal vez lo eran, ya que en algunos casos, como el de los lecheros, llevan exactamente 10 años de reclamos. Costos de los fletes, falta de infraestructura, imposibilidad de exportar, restricciones al comercio, estrepitosa baja de la rentabilidad, entre otros, estuvieron entre los tópicos más abordados por los asistentes, incluso con la gente de la Ciudad que, sorprendida, miraba los extraordinariamente bajos precios que reciben los productores, comparados con los costos al público de los mismos productos. Los ejemplos: kilo de pera, $ 1; de papa, $ 0,80; naranjas, $ 0,50; pollo, $ 0,80; cebolla $ 6; pan $ 1.

... que mientras en Mar del Plata uno de los principales ejes de debate fue la agenda judicial 2016, en el campo, mientras la FAO conmemoraba el Día Mundial de la Alimentación, muchos discutían la magnitud de la caída de la actual cosecha 15/16 que algunos ya ubican bastante por debajo de los 100 millones que se habrían hecho en el último ciclo (y que tiene poco que ver con los números oficiales). La falta de rentabilidad para seguir es el cuello de botella que, además, se traslada a los restantes eslabones de la cadena, como los proveedores de insumos. Por caso, la caída en la utilización de los estratégicos fertilizantes estaría rondando el 25%, según la ONG Fertilizar. Eso daría para este año un volumen por debajo de los 2,5 millones de toneladas, similar al de la campaña 2008/09 cuando el conflicto de la 125 y la sequía determinaron una fuerte caída. La menor producción, a su vez, junto con la baja relativa en los precios internacionales, es la que justifica la disminución del 20% en las exportaciones, tendencia que se mantendría en 2016 ya que no se espera una suba de la producción. Al contrario. También, el menor volumen sería la causa de la firmeza que está mostrando, por ejemplo, el precio de la soja en el mercado local, comportamiento diferente al de la plaza internacional, aunque pocos se animan a reconocer cuál es la verdadera producción.

...que aun en la agradable recepción que el embajador de Japón, Nuritemo Fukushima, realizó en la imponente residencia que este país tiene en Belgrano R, el tema del campo fue eje de las conversaciones. Es que el motivo de la convocatoria era la demostración que el chef Takehiro Ohno realizó sobre el delicioso Washoku que, naturalmente, luego fue ampliamente degustado, en los salones y el generoso jardín de la residencia. Pero para Japón los "alimentos" son centrales y carísimos, ya que su producción es mínima al tratarse de una isla de características volcánicas, muy poco aptas para desarrollar cultivos, especialmente los más extensivos. Allí, mientras algunos comentaban las alternativas de las elecciones en el Mercado a Término de Buenos Aires, (MaTBA), otros comentaban sobre los más de 2 millones de toneladas de trigo que aún quedan en la zona sur, aunque la mayor parte sería de muy baja calidad, incluso como forrajero. El problema es que tampoco se espera un salto cualitativo en la próxima cosecha de fin de año (entre otras cosas, por el bajo uso de fertilizantes), lo que imposibilitaría "mezclarlo" para mejorar la calidad promedio, mecánica bastante frecuente en el país.