Perspectivas

Alivio: China asegura una fuerte demanda de soja

Este año comprará 77,5 millones de toneladas. El impacto en los precios .

22 Jun 2015

China importará en esta campaña 2015/16 el récord de 77,5 millones de toneladas de soja, un aumento de 4 millones con respecto al año anterior y de 18 millones considerando los últimos tres años. Durante el mismo período la producción mundial de soja tuvo un aumento de 49 millones de toneladas (de 268 a 317 millones) y el comercio internacional aumentó en 22 millones de toneladas (de 100 a 122 millones). El aumento de las importaciones de soja por parte de China equivale al 82% de todo el aumento del comercio mundial, y éste es el principal motivo por el cual el precio de la soja en Chicago es China-dependiente. 

A pesar del firme y sostenido aumento de la demanda de parte de China y de sus importaciones, la producción mundial de soja ha tenido una mayor tasa de crecimiento, lo que provocó un aumento de las existencias finales a nivel global de 57 a 93 millones de toneladas. Y éste ha sido el principal factor que provocó la fuerte baja de los precios de la soja sobre el FOB Golfo, indicador y referente mundial para el resto de los países exportadores, como Brasil y la Argentina. La caída de los precios de la soja en el FOB Golfo llegó a u$s 155 por tonelada, pasando de u$s 535 a u$s 380 por tonelada, y lo mismo sucedió con los fletes marítimos por la baja del petróleo. 

Esto le permite a China tener un ahorro en sus importaciones de soja de la actual campaña de u$s 12.500 millones con respecto a la campaña anterior. Por este motivo, la industria aceitera china ha ganado competitividad, mejorando sus márgenes de molienda, luego de tener que soportar márgenes muy ajustados y hasta negativos, por los elevados precios de la soja durante 2012 y 2013. Para la Argentina esta baja en el precio de la soja implica una caída de u$s 1.500 millones en el ingreso de divisas, sólo considerando las exportaciones de soja como grano. 

El sostenido crecimiento de la demanda de China se fundamenta en la mejora del poder adquisitivo, medido en su "producto bruto per cápita" y el ingreso al mercado laboral y a las grandes urbes de más de 10 millones de personas por año, a partir de la planificación llevada adelante por el Gobierno. La gran sorpresa fue el aumento de la fuerza laboral de 14 millones de personas registrada durante el año anterior, fortaleciendo aún más el aumento en el consumo de alimentos.

En 2013, el PBI per cápita continuaba creciendo y llegaba a 5.113 euros, cuando en 2008/09 llegaba a 2.314 euros, un aumento de 2.800 euros que casi duplica los ingresos de hace cinco años. Esta mejora en los ingresos impacta directamente en la mejora de la dieta, aumentando la tendencia del consumo de proteínas animales (carne de cerco, aviar y vacuna). Actualmente en China más del 56% de la población es urbana y para 2023/24 se proyecta que dicho porcentaje aumente al 63%, un incremento de 100 millones de habitantes urbanos, a un ritmo de crecimiento anual de 10,5 millones de personas. Este aumento de la población urbana, que llegará a un total de 900 millones de personas en el período proyectado, seguirá traccionando la demanda interna de proteínas animales, y en consecuencia la demanda de importación de proteínas vegetales, representada en el poroto de soja. 

La carne de cerdo es la principal fuente de proteína animal de los chinos, con un consumo anual de 60.000.000 toneladas o 600 millones de cabezas, y representando más del 57% del consumo mundial. A esto se debe agregar el consumo de carne de pollo de 13,35 millones de toneladas, a un paso de convertirse en el primer consumidor mundial de este tipo de carnes, donde Estados Unidos ocupa el primer lugar con un consumo de 13,66 millones de toneladas para 2020, de aquí a los próximos cinco años, para satisfacer el aumento de su consumo de carnes, China necesitará importar 94 millones de toneladas de soja, un aumento de 16,5 millones con respecto al volumen que importara en 2015/16, de 77,5 millones de toneladas.

La producción mundial de soja deberá aumentar un promedio de 4,12 millones de toneladas anuales de aquí hasta el 2020 sólo para abastecer el crecimiento de la demanda por parte de China. Nuevamente Estados Unidos, Brasil y la Argentina serán los principales países responsables de aumentar su producción y saldos exportables de soja, con destino a China. Con la actual coyuntura de los precios internacionales, el cultivo de soja no es rentable en muchas zonas productivas de la Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. Los abultados stocks mundiales podrán colaborar en satisfacer la mayor demanda de China y amortiguarla, al menos para los próximos dos años. Luego debería haber una sustancial mejora en el precio internacional de la soja para volver a permitir un aumento de la producción y recuperación de las existencias.