Exportación

Arribó a China el primer embarque de sorgo forrajero argentino

Se trató de una carga de 39.075 toneladas, que ingresó por el puerto de Mayong en la provincia de Guangdong, según la información oficial.

21 May 2015

El Ministerio de Agricultura anunció este jueves que ingresó el primer barco de sorgo forrajero argentino en la República Popular China, en el marco del Protocolo Fitosanitario firmado por el ministro Carlos Casamiquela en noviembre pasado, con el titular de la Administración General de Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena (Aqsiq) del país asiático.

Según se informó, se trató de una carga de 39.075 toneladas, que ingresó por el puerto de Mayong en la Provincia de Guangdong. De este modo, las importaciones de sorgo argentino van tomando fuerza paulatinamente luego de la última cosecha y a medida de que los exportadores argentinos e importadores chinos se familiarizan con las condiciones que regulan el comercio bilateral de este producto.

Argentina manifestó el interés por exportar este producto en 2007, pero recién AQSIQ inició el análisis de riesgo de plagas en 2013, en momentos en que las importaciones chinas pasaban de 80.000 a 1 millón de toneladas.

 El secretario de Coordinación Político Institucional y Emergencia Agropecuaria,Javier Rodríguez, destacó que “dada la producción que en Argentina en los últimos años rondó los 4 millones de toneladas, la apertura de este mercado plantea un horizonte donde las exportaciones a China van a impulsar un incremento visible en el total del volumen producido”. 

La titular del Senasa, Diana Guillén, remarcó que dicho organismo ya ha certificado el envío de un buque y de varios contenedores más, mientras se acumulan otras solicitudes de inspección con destino a China. El año pasado, el gigante asiático se convirtió en el primer importador mundial de sorgo con 5,8 millones de toneladas provenientes desde Estados Unidos y Australia, por un valor de 1.638 millones dólares, según datos de la Aduana de China.

El interés de China por el sorgo forrajero se debe a que se trata de un sustituto más económico que el maíz y de similares características nutritivas. A esto se suman dos factores adicionales que facilitan su comercialización en comparación a este último grano: puede ser importado libremente al no estar sujeto a un contingente arancelario y los embarques no requieren ser amparados por certificados de bioseguridad, porque no es un producto transgénico.