Bioetanol

Maíz 98 octanos (2da parte)

Para productores CREA del noroeste del país industrializar el cereal en origen es cosa juzgada. Decididamente van por el cupo de bioetanol en el corte y una planta de secado

Se vienen

El cártamo también interesa, porque es un cultivo de invierno que se adapta bien a la zona. Se siembra a fines de abril-principios de mayo y se lo cosecha a fines de noviembre. Tiene una raíz pivotante que explora profundamente el perfil. “Lo estamos comercializando por intermedio de Bunge y se obtiene aceite a fasón –dice Ignacio–. Se recolecta con una plataforma sojera, muy lentamente por la cantidad de material verde que ingresa a la máquina. El rinde puede ir desde 700 hasta 1.200 kg/ha, y su valor está muy relacionado con el precio del girasol. La semilla puede ser propia o bien ser recibida si es que hay un contrato de por medio”.

Asimismo es el primer año que le ponen unas fichas al garbanzo. Lo están probando bajo riego –por manto, no es lo ideal– y en secano. “Probablemente tengamos que mejorar el curado de la semilla y otras cuestiones. Si el mercado acompaña –se habla de negocios de exportación por u$s/tn 700– el número es interesante. Eso sí, me asusta cuando todo el mundo se vuelca a este tipo de cultivos”, reconoce el profesional.

Ajuste permanente

En el caso de maíz se presupuestan 6.000 kg/ha pero es habitual lograr 7.000-7.200. “Los potenciales bordean los 12.000 según lo que se ve en los ensayos. Básicamente necesitamos sembrar mejor el cereal; calidad de siembra es clave, combinada con una adecuada fertilización. Somos muy buenos produciendo soja y no tanto generando maíz”, acepta Ignacio.

El planteo, que incluye algo de pisingallo, muestra una fuerte presencia de Dekalb 390 y 190, éste último con gran crecimiento. Se trata de un híbrido simple templado, con muy buenos rendimientos, cuando siempre se pensó que en esta zona nada superaba a los tropicales.

Como resultado de una primavera seca, la soja se siembra a partir del 25 de noviembre hasta fines de diciembre, y el maíz desde mediados de diciembre hasta mediados de enero. El cereal necesita amplitud térmica para lograr buenos rendimientos, y en esta zona eso se da cuando los días se empiezan a acortar. El riesgo es tener mucho calor en el período crítico, por eso la fecha óptima es la indicada, y surge de numerosos análisis.

Estos suelos son ricos en fósforo (P), y lo que aplican en Anta del Dorado apunta a reposición. Y es indispensable aportar 100 kg/ha de nitrógeno (N), porque implican 2.000 kg más de rinde. Es una respuesta inmediata. Desde que el potencial y los precios del cereal han crecido, a pesar de estar pisados, vale la pena gastar en nutrientes.

En materia de enfermedades Giberella es la que se lleva las palmas. De pronto no está, de repente hace muchísimo daño. Comercialmente, con más del 8% de incidencia el lote queda fuera de juego, y por sobre el 10% es tóxico para los animales.

En cuanto a la comercialización de maíz, hace unos años tenían un convenio con un feedlot grande que les permitía cosechar húmedo y reducir fletes. Otra opción es hacer maíz flint para Quilmes, o con Cargill, por el que se recibe un sobreprecio (u$s/ha 120-140). Eso si el negocio del flint exige tener muy aceitada la logística en recibo; es una buena alternativa para campos que no son los mejores. Algunas de estas variantes van a ser instrumentadas este año mientras dan frutos las nuevas inversiones.

¿Y el sorgo? No atrae demasiado, lo ven tan complicado como el maíz a la hora de venderlo, y encima es el predilecto de las palomas, una plaga temible en esta zona.

Calidad de siembra

En soja, Anta del Dorado siembra materiales de los GM VII y VIII, con predominio de los VII largos. En menor medida se usan GM V y VI, con muy buenos rindes cuando todo acompaña; de lo contrario los riesgos son importantes. “DONMARIO está vendiendo DM 7.8 con excelentes resultados. Y Nidera 8000 no ha logrado ser superada por otros materiales de la misma compañía”, dice nuestro entrevistado.

La soja no se fertiliza, tampoco se la inocula. “Vemos los nódulos, los cortamos, evidentemente hay cepas naturalizadas –explica Ignacio–. Estamos dispuestos a inocular, pero si no hay resultados concretos no tiene sentido. Son cosas que se siguen analizando porque  nos llama la atención. A la larga vamos a consumir inoculante merced a esta movida de recibir la semilla ya tratada”.

La oleaginosa se siembra a 52 cm. Pisani piensa que achicar más el entresurco puede tener sentido –pero sin exagerar–, en especial en zonas marginales. Lo que sí ha cambiado es el uso de fungicidas; hoy todos los productores recurren al menos a una aplicación. “La que seguro paga es la que se hace en R1 para enfermedades de fin de ciclo –avisa–. Por lo demás, hace mucho que contamos con materiales resistentes a mancha ojo de rana”.

En Anta del Dorado han mejorado sobremanera la calidad de siembra de soja, desde el curado de la semilla y el uso de simiente con buen poder germinativo hasta la implantación. “Cuando lográs una buena implantación tenés el 50% de la batalla ganada. Hoy promediamos 3.200-3.300 kg, muy cerca del techo para la zona, al menos hasta que aparezca algo nuevo en biotecnología que vuelva a mover la aguja. Las BtRR2 pueden ser una ayuda para nosotros, al menos para lepidópteros; al año pasado tuvimos un ataque grande de Pseudoplusia, la falsa medidora”.

Mejor seco

Finalmente, el elenco de la gruesa se completa con poroto alubia, colorado y negro, el primero bajo contrato. Se presupuestan con un rinde de 1.200 kg, y en Salta hay ocho exportadores que obran como canal para la venta fronteras afuera. Se prefieren aquellas zonas donde llueven 400 mm, porque el agua en exceso deteriora la calidad del poroto.

Estos cultivos se siembran del 10 de febrero al 20 de marzo, con unos 110-120 kg/ha, y muy pocos agroquímicos –al ser de siembra tardía la presión de malezas es menor–. Eso sí, hay que cuidarlos sobremanera de la mosquita blanca, que les inyecta un virus. Se los cosecha con plataforma sojera, a menos vueltas para no dañar el poroto.

Gestión

“Nos preocupa que se complique el acceso a la tecnología al no permitirse el ingreso de tractores y cosechadoras. Todos los repuestos muestran un aumento en dólares muy fuerte, y en más de un caso no se consiguen. Es positivo fabricar aquí, pero tiene que hacerse de manera gradual y exigiendo competitividad. Y por supuesto nos alarma esto de quedarnos cinco o seis meses con nuestros productos en silos bolsa porque no se les encuentra destino”, se lamenta Pisani.

El flete es un tema muy pesado en esta zona. Anta del Dorado cuenta con una planta sobre el ferrocarril, casi como tener agua en el desierto. “No es la panacea, pero el año pasado pudimos despachar varios operativos por esta vía a Rosario (60%) y tenemos un ahorro neto de $/tn 45 respecto del camión”.

El último comentario estuvo ligado al arrendamiento. “Trabajamos con gente con la cual tenemos una relación de 15-20 años, como si fuéramos socios, propietarios que entendieron que si tenemos condiciones para producir mejor ellos ganarán más. Vamos a porcentaje y nunca hemos salido a pagar barbaridades. Contamos con una estructura muy pequeña, y para pegar el salto que pretendemos hacia el valor agregado necesitamos profesionalizarla un poco más” remata Ignacio.

Ing. Agr. Claudio Gianni