Lluvia, calor y alta humedad pueden complicar los cultivos de invierno
Las lluvias fuertes y altas temperaturas pueden afectar los cultivos de invierno, que están próximos a cosecharse, también podrían afectar a los campos ganaderos en Buenos Aires.
“Los cultivos de invierno, que están formando el rendimiento y están próximos a cosecharse, como el trigo y la cebada cervecera y la colsa, fueron castigados por las lluvias fuertes de otoño , invierno y primavera y hay que seguirlos muy de cerca porque pueden aparecer enfermedades”, señaló el agrónomo y climatólogo Eduardo Sierra.
Para Sierra, “se está en presencia de un récord de temperaturas, lo que termina de implicar el retorno de un ciclo adverso de altas temperaturas como hubo en las décadas del 30 y 40 del siglo pasado, donde las lluvias son más parecidas a tormentas fuertes y localizadas”.
“La secuencia es mucho calor, tormentas y descenso de temperatura, lo que afecta los cultivos de invierno e inclusive todavía puede causar riesgo de heladas en el sudeste bonaerense”, explicó.
Respecto a los llamados cultivos de verano (soja y maíz), Sierra vaticinó un buen periodo para la implantación, con una seca que permita sembrar y elevadas temperaturas que favorezcan la germinación.
“La siembra de soja y maíz va a proceder con buen ritmo, aunque haya algún que otro inconveniente”, Para Sierra, el verano va a seguir con las lluvias fuertes, el calor y la humedad, pero con precipitaciones más espaciadas. agregó.
“Hay que mirar bien esas lluvias, que van a aumentar mucho en principio de marzo y pueden complicar la situación de los campos ganaderos de la provincia de Buenos Aires”, opinó Sierra.
Para el climatólogo, esta situación de inestabilidad del clima obedece a la “oscilación multilateral del Atlántico, que cada 30 años cambia su temperatura y genera un periodo de inestabilidad, por lo que hay que acostumbrarse a este fenómeno”.