La Mesa de Enlace se mostró unida ayer en La Rural, en donde realizó una campaña de esclarecimiento denominada "a vos cuánto te cuesta" para mostrar la enorme diferencia de precio que existe entre los valores que reciben los productores por los alimentos y lo que paga el consumidor en las grandes cadenas de supermercados por esos mismos productos.
A su vez, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Rubén Ferrero, aprovechó la oportunidad para afimar que "de no haber respuestas de parte del Gobierno, va a haber protestas después de las PASO". Si bien oficialmente la Mesa de Enlace no emitió un comunicado informando sobre un nuevo paro, es sabido que las bases de productores presionan a los dirigentes para que realicen más protestas debido a que no hay respuesta oficial a los problemas del sector.
Con respecto a las características de la protesta, el dirigente explicó que "será de mayor envergadura que la efectuada entre el 15 y el 19 de junio últimos, y estamos evaluando cómo se realizará si no hay respuesta del Gobierno a los reclamos".
A su turno, el vicepresidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Julio Currás, aseguró que "seguramente después del 11 de agosto va a haber medidas de fuerza, más contundentes y más profundas, porque es lo que nos están pidiendo las bases, y yo creo que contaremos con la participación de más sectores que van a acompañar con reclamos genuinos, como son los trabajadores por el Impuesto a las Ganancias, sectores del transporte y otros sectores que la están pasando muy mal". Y agregó: "Pensemos que hoy la economía argentina está resentida y por eso productores y trabajadores estamos afrontando consecuencias muy importantes. Por todo esto, después de las PASO vamos a anunciar alguna medida de fuerza. No antes, porque no queremos que el Gobierno se victimice frente a lo que podamos hacer y queremos respetar los tiempos de la democracia, pero luego seguiremos haciendo oír nuestros reclamos". Los cuatro dirigentes repartieron ayer un volante en el que se demuestra que un productor recibe por un kilo de carne $ 16,33, por un kilo de cebolla $ 1,25, y por uno de manzana $ 0,80, mientras que en el equivalente a un kilo de pan cobra $ 1,92 y por un litro de leche recibe $ 1,96.
Con respecto a los precios que pagan los consumidores, Ferrero advirtió: "Desde nuestro sector debemos hacer docencia y el ama de casa y todos los argentinos deben saber que hoy hay inflación y muchos de los alimentos son caros para la mesa de los argentinos y la culpa no la tiene el productor, porque hay otros factores que están llevando esos precios a la góndola".
Consultado sobre las razones que impulsan un fuerte aumento del precio de los alimentos, el líder de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Miguel Etchevehere, aseguró que "son muchas, y la mayoría son artificiales, si el mercado no está trabado, hay competencia y se puede comercializar libremente, eso se soluciona, sobre todo ahora que estamos con buenos precios internacionales" y consideró que es fundamental en la parte pública "terminar con la inflación, hay que aflojar con la presión impositiva, ya que entre un 85% y un 92% del resultado de una empresa agropecuaria se va en impuestos".
En tanto, su par de Coninagro, Carlos Garetto, advirtió: "Podemos ver la gran distorsión que hay en los precios, aquí el Estado debería lograr, a través de las políticas públicas un equilibrio en todo el desarrollo de la cadena que agrega valor y, sobre todo, corregir la política agropecuaria"