El cepo del Gobierno a la exportación de trigo, que se reforzó en los últimos días con la suspensión del CUIT a la cerealera Nidera por haber concretado un embarque del cereal a Brasil, pese a hacerlo con la autorización correspondiente, está siendo aprovechado en este momento por Uruguay, que finalizó su cosecha y está tratando de ubicar en el mercado brasileño todo el cereal que puede.
Según fuentes uruguayas del mercado de granos, el saldo exportable total que tiene ese país supera para este año un millón de toneladas. De hecho, 150.000 toneladas habrían sido embarcadas en diciembre a Brasil y el ritmo sería mayor para lo que resta de enero y los próximos meses.
"Es muy probable que vayamos a pasar las 500.000 toneladas a Brasil", dijo a LA NACION el analista uruguayo Eduardo Blasina.
Contra las ventas de Uruguay, las de la Argentina, que históricamente para esta época del año es un abastecedor constante en Brasil, no registran actividad.
Con la entrada del trigo uruguayo a Brasil comenzó a mermar el ingreso del cereal de los Estados Unidos. Esto pese a que, según consignó Reuters ayer de fuentes de molinos brasileños, entre diciembre y principios de enero habrían entrado desde EE.UU. 180.000 toneladas.
Vale recordar que, en 2013, Estados Unidos desplazó a la Argentina como principal proveedor de trigo de Brasil y colocó allí más de 3 millones de toneladas. Sólo en noviembre pasado EE.UU. exportó a Brasil 500.000 toneladas.
Para la Argentina, que Uruguay venda a Brasil evita que este país vuelva a suspender el arancel externo común del 10% que protege el cereal del Mercosur frente al de otros orígenes. "Uruguay es el único que nos garantiza que el impuesto del 10% para los orígenes extra-Mercosur [del trigo] siga vigente", contó Leandro Pierbattisti, asesor de la Federación de Acopiadores.
Para Pierbattisti, si la Argentina no abre la exportación y Brasil en cambio quita la protección arancelaria para traer cereal fuera del Mercosur, el trigo argentino sufriría una baja potencial de US$ 25 por tonelada.
"Si no hay una apertura de la exportación es muy difícil que el precio se siga manteniendo", acotó Pierbattisti.
Para el productor Néstor Roulet, con la exportación cerrada hoy al agricultor ya se le ofrece 15 por ciento menos del precio que se les podría pagar. Por su parte, Lorena D'Angelo, analista de FyO, señaló que la exportación "está retirada" y que el productor apunta a vender sólo el trigo necesario. "Vemos que los productores cosechan, cumplen compromisos y el resto [del trigo] se lo guardan porque no tienen la exportación y saben que la molinería puede pagar más", indicó.
POR LA EXPORTACIÓN
Por lo pronto, en el mercado esperan la apertura de la exportación. "Esperemos que se habilite una cantidad importante de trigo. No es bueno que [Brasil] tenga que comprar en otros mercados en este momento", afirmó Ricardo Marra, presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Hoy la dinámica comercial está complicada. "Prácticamente no hay recibo en los puertos y muchos compradores desviaron (a otras plantas) el trigo comprado en los puertos", contó el operador Iván Malianni.
Además, preocupa en la cadena comercial el impacto de la decisión de la AFIP de suspenderle el CUIT a Nidera porque afecta de lleno también los negocios de los productores.
"El impacto es alto para toda la cadena de producción. Haberle bajado el CUIT impide el cumplimiento de todas las operaciones, ya que no podés entregarle la mercadería vendida, en virtud que como la misma AFIP autoriza las Cartas de Porte al no tener el CUIT activo no te permite la carga. Tampoco se le puede facturar la mercadería entregada, no podés registrar las operaciones en las bolsas y no puede operar futuros", expresó Javier Buján, presidente del Centro de Corredores y Agentes de la Bolsa de Cereales.
INTERVENIDO Y CON PÉRDIDAS DE OPORTUNIDADES
Otros ganadores
Con la intervención oficial en el mercado de trigo, en 2013 la Argentina redujo su oferta a Brasil y este país se abasteció en primer lugar de los Estados Unidos
El turno de Uruguay
El vecino país finalizó su cosecha y le quedó un saldo exportable que está colocando en el mercado brasileño. Sólo en diciembre habría vendido unas 150.000 toneladas.