A las 7 de Argentina, los habitantes de Samoa y otras islas en el Pacífico fueron los primeros del mundo en dar la bienvenida a 2016.
Los habitantes de este Estado insular son los primeros en celebrar el nuevo año desde 2012, cuando el gobierno decidió cambiar el uso horario, ya que hasta entonces los samoanos vivían con una diferencia horaria de 23 horas con la vecina Nueva Zelanda, informó la agencia alemana DPA.
También ya llegó el año nuevo a Nueva Zelanda a las 8 de de la mañana hora argentina, con un show de fuegos artificiales en Auckland, mientras que en la costa este de Australia (Sydney y Melbourne) el año nuevo llegará a las 10 de la mañana hora argentina.
En la capital rusa y en numerosas capitales europeas se han extremado este año las medidas de seguridad y se han desplegado numerosos agentes de la policía por temor a ataques.
En Bruselas, la capital belga, las autoridades suspendieron los tradicionales fuegos artificiales por amenazas terroristas.
Los mayores fuegos artificiales de la historia de Sydney marcaron el inicio de un maratón mundial de celebraciones para dar la bienvenida al año 2016, empañadas por la amenaza yihadista.
En Asia, en Oriente Medio, en África, en Europa y finalmente en América, millones de personas celebrarán en las calles las doce campanadas de medianoche entre fuegos artificiales, conciertos y espectáculos de luz.
El derroche de efectos pirotécnicos por encima del icónico puente de la bahía de Sydney y de su Ópera es cada 1 de enero el primer gran espectáculo de Año Nuevo. Y, la mayor ciudad de Australia, organizó este año los festejos aún más a lo grande.
"Esto mejora cada año", resumió el alcalde de Sídney, Clover Moore. En total, siete toneladas de artilugios pirotécnicos iluminaron el cielo de esta ciudad australiana.