El candidato presidencial por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli, minimizó hoy las distintas encuestas que ponen arriba de las preferencias a su rival de Cambiemos, Mauricio Macri, de cara al ballottage, al afirmar que “han tenido un nivel de error muy grosero, muy burdo” en las estimaciones para la última elección.
Además, volvió a negar que en caso de ser electo en el ballottage del próximo 22, vaya a tener condicionamientos para gobernar por parte del kirchnerismo, y aseguró que será él quien mande y quien tome decisiones.
“La gente dirá el próximo 22, pero las encuestadoras han tenido un nivel grosero de error durante la última elección, sin precedentes. Fue muy burdo lo que han hecho en las últimas elecciones la mayoría de las encuestadoras”, aseguró el aspirante a la Casa Rosada en declaraciones a radio MDZ de Mendoza.
Scioli estimó también que “en los últimos días, habiendo una gran cantidad de indecisos y personas que están dispuestas a repensar su voto, va a ser mucho más preciso” pronosticar un resultado.
El gobernador bonaerense recordó que para la primera vuelta electoral “era el favorito” y que fue el que sacó “más cantidad de votos”, y afirmó que rumbo al balotaje ve “una reacción creciente” y “toma de conciencia” sobre las diferencias entre uno y otro candidato.
“Veo una reacción en muchos sectores de la sociedad, de toma de conciencia y de reacción frente a lo que se viene con el otro candidato en caso de que sea electo. La gente no quiere más ajuste, ni devaluaciones, ni techos para las paritarias, ni pensar para qué sirven tantas universidades”, aseveró.
Scioli también reiteró que no tendrá condicionamientos si es electo Presidente, y desestimó una vez más los dichos que hablan de que deberá consultar a Cristina Fernández en la toma de decisiones.
“El Ejecutivo es unipersonal, es el Presidente el que manda, el que firma los decretos, el que toma las decisiones, el que arma su Gabinete. A partir del 10 de diciembre, yo soy presidente en ejercicio pleno de mis facultades constitucionales. Yo soy el que mando y el que tomo las decisiones”, advirtió.
En ese sentido, recordó que cuando fue electo Néstor Kirchner “decían que iba a ser el Chirolita de (Eduardo) Duhalde”, y que también hablaban de que “iba a haber doble comando” cuando Cristina Fernández asumió su primer mandato.
Con respecto a la campaña, el postulante del oficialismo volvió a diferenciar su proyecto con el de Macri, al que vinculó con al “libre mercado” y a una economía manejada “por los buitres y el Fondo Monetario Internacional”.
“Han mandado a callar a todos los economistas. No puede hablar (Carlos) Melconian, (Federico) Sturzenegger, (Alfonso) Prat-Gay, porque cada vez que han hablado, han dicho que van a sacar los subsidios. Yo garantizo mantener los subsidios”, resaltó.
Además, sostuvo que mantendrá “una administración responsable de las reservas fijando prioridades”, y advirtió que el otro camino es la gran devaluación, dejar librado todo al mercado”.
“Por eso Macri está poniendo gerentes de empresas privadas en todas las áreas. No quiero que a YPF la maneje un ex gerente de Shell, quiero que la maneje el Estado nacional con las provincias”, agregó.
