El Gobierno nacional volvió a reducir las retenciones a las exportaciones de biodiesel y las dejó en su mínimo histórico desde que se comenzó a exportar el combustible. Con forma retroactiva a principios de octubre, las autoridades nacionales fijaron en 3,31% la retención efectiva sobre los embarques.
Esta es la tercera modificación de la alicuota que se realiza en el año marzo y junio fueron las anteriores momento en el que había quedado establecido una impuesto a la exportación de 5 por ciento. Según publicó Valor Soja, los ajustes anteriores coincidieron con un derrumbe de las exportaciones declaradas de biodiesel: 33.941 toneladas en febrero, 80.750 en marzo y 63.261 junio de este año.
Pero, a pesar de esos ajustes y de que el sector exportador venía mostrando un movimiento a la baja, el tributo había vuelto a crecer. Durante los diez primeros meses del año se declararon envíos al exterior por 1,113 millones de toneladas lo que muestra una significativa caída con los 2,178 millones en el mismo período de 2014.
Según dijo Víctor Castro, ceo de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio) gran parte de la caída se debe a que la baja del costo del barril de petróleo le generó más competitividad al gasoil lo que tuvo como correlato en la pérdida de mercado para el biocombustible en los mercados en donde el "corte" no es obligatorio.
Además, a esto se le suma que que los productos argentinos tienen cerrado el mercado europeo desde el 2013 uno de los mayores consumidores de este producto por "supuesto" dumping; dejando solamente dos destinos para la producción local: los Estados Unidos y Perú.
Para poder comprender el golpe que significa la pérdida de la Unión Europea sólo hace falta ver los números previos al cierre. En 2011 las ventas al bloque sumaron u$s 1.847 millones y la Argentina se posicionaba como primer abastecedor del bloque. Entre enero y agosto de 2013 se redujeron a tan sólo 390 millones de dólares.
Frente a esto, según explican en el portal Nextfuel, los productores local no lograron trasladar el excedente al mercado interno y hoy existe en el sector una capacidad ociosa de 60 por ciento.
En lo que se refiere al mercado interno el valor también está regulado por el Estado nacional. Según los precios establecidos para el consumo interno de biodisel para el pasado octubre, Planificación Nacional dispuso que sea $ 6910 por tonelada en el caso de las medianas empresas (principales abastecedoras del cupo), mientras para las grandes no integradas (que son aquellas que tienen que salir al mercado a comprar aceite de soja) se determinó en $ 6100 la tonelada. Finalmente, en lo que se refiere a las grandes compañías integradas, quedó en 5154 pesos por tonelada.