El óptimo resultado de la cosecha de soja en la zona de Mato Grosso, en Brasil, garantizaría una producción récord, con más de 90 millones de toneladas esta temporada, a pesar de los problemas ocasionales que hubo en algunas regiones del país vecino. Ante es escenario, los productores estiman que podrán obtener más rindes que en la campaña anterior.
El analista Andrè Pessoa, de Agroconsult, reunió a agricultores en la región de Rondonópolis, en el sur de Mato Grosso, y presentó su última estimación para la cosecha de Brasil: 91,6 millones de toneladas. La cifra se revisará al final de la expedición, en la que ocho equipos de técnicos recorrerán 60.000 kilómetros en el área de cultivos de todo el país sudamericano. “Si no se alcanzan 91,6 millones de toneladas, se estará muy cerca de ella”, garantiza el experto.
Se han detectado problemas en el centro agrícola de Río Verde, en el sudoeste de Goiás, con pérdidas menores causadas por la sequía. “Pero cualquiera de los dos o tres sacos (productividad por hectárea) de cultivos en Mato Grosso compensa cualquier incumplimiento en Goiás y en otras regiones productivas”, considera el analista.
Los técnicos agrícolas también registraron pérdidas en zonas del norte de Paraná y del sur de Mato Grosso do Sul, en ocasiones afectadas por la falta de lluvias durante los últimos meses.
El Mato Grosso representa no menos del 28% de los 29,7 millones de hectáreas de soja plantadas en esta temporada en Brasil. En estas tierras, es difícil encontrar a agricultores que se quejan del clima y del desarrollo del cultivo. La cosecha en este estado se encuentra todavía en las primeras etapas, muy cerca del 10 %.
“Este año el tiempo ha sido favorable”, expresa el productor Osvaldo Pasqualotto, que comenzó a cosechar las 5.500 hectáreas de soja sembradas en la región de Rondonópolis. “Los promedios van mucho más allá de lo que nos imaginábamos. Ciertas zonas alcanzan los 70 sacos por hectárea”, asegura.
