Los precios de la soja registraron una importante caída ayer en la Bolsa de Chicago, luego de que el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos confirmó que compradores de China cancelaron una operación por 395.000 toneladas de grano estadounidense.
Al cierre de los negocios, las pizarras mostraron quitas de US$ 5,60 y de 5,42 sobre los contratos marzo y mayo de la soja, cuyos ajustes resultaron de 318,85 y de 319,86 dólares por tonelada. En una campaña donde lo que abunda es soja, "la devolución" de los compradores chinos fue muy mal recibida por los fondos de inversión, que liquidaron unos 11.000 contratos, equivalentes a poco menos de 1,5 millones de toneladas.
El hecho de no que no trascendiera la razón de la cancelación, ni la posibilidad de que el volumen comprometido pasara al ciclo 2016/2017, entre los operadores quedó la incertidumbre sobre si la medida fue puntual o la primera de una serie de cancelaciones, a pocas semanas de que la cosecha de Brasil comience a ingresar en el circuito comercial y a sólo días de que China salga del mercado (del 7 al 13 del mes próximo) por las festividades del Año Nuevo.
Tal fue la magnitud bajista de la noticia que el mercado no pudo capitalizar dos factores alcistas, como la devaluación del dólar frente al euro, que llevó la paridad entre las monedas de 1,0914 a 1,0944, y la mejora del valor del petróleo, que varió de 32,30 a 33,33 dólares. Tampoco lograron revertir la tendencia la falta de humedad en zonas productoras de la Argentina, ni el posible atraso en la cosecha de Brasil si se registran las lluvias previstas para los próximos días.
Las bajas externas también afectaron al mercado local. En efecto, las fábricas ofrecieron $ 3200 por tonelada de soja disponible para las terminales del Gran Rosario, $ 100 menos que anteayer. La oleaginosa de la próxima cosecha se negoció a 210 dólares, con una quita de 2 dólares por tonelada.
En su reporte diario, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) relevó negocios por 10.000 toneladas de soja, por debajo de las 20.000 toneladas de la rueda anterior.
Las posiciones febrero y mayo de la soja en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) retrocedieron US$ 2 y 2,20, mientras que sus ajustes fueron de 236 y de 214,80 dólares.
Firmeza invariable
El maíz argentino no siguió la línea de la soja y pese a las bajas externas volvió a mostrar su fortaleza. Por tonelada disponible los exportadores pagaron $ 2150 para la zona del Gran Rosario y para Bahía Blanca, 20 y 50 pesos por encima de los valores vigentes anteayer. En Necochea el cereal se mantuvo estable, en 2000 pesos.
Firmes se mantuvieron los precios del maíz de la próxima cosecha, por el que los compradores pagaron US$ 155 por tonelada para Rosario y para Bahía Blanca, y US$ 153 para Necochea.
En el Matba se reflejaron muy parcialmente las bajas externas, dado que las posiciones abril y julio del cereal resignaron US$ 0,50 y 0,30 al cerrar con ajustes de 155 y de 150,50 dólares por tonelada.
Y China también fue responsable de la caída del precio del maíz en Chicago, tras la confirmación de la compra de poco más de 1 millón de toneladas de cereal de Ucrania. Los contratos marzo y mayo del grano grueso en Chicago perdieron US$ 1,48 y 1,57, en tanto que sus ajustes resultaron de 143,89 y de 145,86 dólares por tonelada.
Respecto del trigo, los exportadores ofrecieron US$ 145 por tonelada de grano condición cámara para Bahía Blanca y para Necochea, frente a los 1970 y a los 2000 pesos vigentes anteayer. En Rosario la propuesta fue de US$ 140, sin descarga.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los molinos pagaron entre 1900 y 2900 pesos por tonelada. En el Matba, la posición marzo se mantuvo estable, con un ajuste de 144,80 dólares.
Postulan a Rusia como proveedor de la oleaginosa
PEKÍN (Reuters).- Rusia tiene las condiciones necesarias para convertirse en un gran exportador de soja, dijo ayer el director de la Oficina Central de Trabajo Rural de China, Chen Xiwen. "Hoy China importa soja en grandes cantidades y el 80% proviene de EE.UU., Brasil y la Argentina", indicó el funcionario en una conferencia organizada por el Consejo de Estado.
Añadió que si bien China ya importa soja desde Rusia, la cantidad es pequeña. "Creo que Rusia podría convertirse en un gran productor de soja", destacó. Y fundamentó su afirmación en que ese país dispone de amplios territorios para cultivar. "Muchos agricultores chinos ya cultivan soja en Rusia. Ambos países tienen un gran potencial para desarrollar una mayor cooperación en esta área", dijo Xiwen.
Dentro de los 81,69 millones de toneladas importados en 2015, China le compró a Rusia 373.465 toneladas, un 529,54% más que durante 2014.