Piden más ayuda para productores del sur

Legisladores rionegrinos solicitaron al Poder Ejecutivo Nacional y al Congreso de la Nación que implementen la exención total de impuestos nacionales por cinco años a partir del 2013, la urgente puesta en vigencia de la corresponsabilidad gremial como método de aporte social y la quita total de retenciones a la lana para productores ganaderos ovinos y caprinos de la Región Sur, comprendidos en zona de desastre, declarada legalmente en los departamentos de secano.

Los legisladores Alfredo Pega y Darío Berardi, del bloque Alianza Concertación, consideraron que a la producción ovina y caprina en emergencia de la provincia de Río Negro no se le puede cobrar ningún impuesto nacional, por lo menos por cinco años y se deben quitar las retenciones a la lana para que el sector pueda cumplir con las contribuciones sociales.

Requirieron también implementar rápidamente la corresponsabilidad gremial, figura que ideó el productor ovino Oscar Contín, de la Línea Sur, y que desarrolló en ámbito de las Confederaciones Rurales Argentinas, aunque que actualmente ambos legisladores no entienden por qué no se pone en práctica.

Pega y Berardi explicaron que la Región Sur está inmersa en “la crisis productiva, social y económica más grave de toda su historia, dado que por problemas climáticos el régimen de lluvias se ha visto restringido desde hace casi ocho años”.

“Debemos sumarle a este fenómeno la caída de cenizas de los volcanes el Chaiten y Puyehue; éste último las esparció por el territorio rionegrino con acumulaciones importantes en distintos lugares de la Región Sur. Las escasez de lluvias y de nieve hizo que mermara notablemente el caudal de agua subterránea y superficial y en muchos casos se secaron arroyos, aguadas, pozos y perforaciones generando un problema grave en la región, en algunos sectores afecta el 50 por ciento de los campos en la zonas de bajos y un 100 por ciento en la Meseta de Somuncura”, consignaron en un proyecto de comunicación.

También describieron que “todo esto ha ocasionado una mortandad de animales ovinos y caprinos sin precedentes; en el año 2006 teníamos más de 2 millones de ovejas, hoy 600 mil, la pérdida del stock es insuperable y la hacienda que queda se está avejentando prematuramente por el desgaste de su dentadura producido por la ceniza que cubre los pastos y que cada vez que corren vientos fuertes como los ocurridos el 6, 7 y 11 de este mes, cuando la ceniza del Suroeste se trasladó a toda la región cubriéndola nuevamente”.

Agregaron: “La genética perdida por mortandad de hacienda madre es incalculable e irrecuperable. Hay corderos no logrados, porque las pariciones son muy malas y las señaladas no superan el 20 por ciento hace años y generan que no haya reposición de la majada, lo que implica el avejentamiento de la misma. Las pérdidas por todos los conceptos se estiman en 2.000 millones de pesos, cifra irrecuperable, mientras los problemas de agua se siguen acrecentando día a día y los productores muchos ya han perdido todo y se van al pueblo en busca de subsistencia a través de los municipios”.